Varias decenas de personas se concentraron ayer ante la Delegación del Gobierno de Murcia, convocadas por la plataforma Stop Racismo para denunciar el "racismo asesino" de los Gobiernos europeo, marroquí y español que llevó a la "masacre" que dejó en la frontera de Melilla al menos 23 migrantes muertos en junio.
Haciendo ondear una bandera de Nigeria, en las pancartas que portaban se leía "Racismo asesino. Unión Europea, Gobiernos de Marruecos y España, responsables", "La migración es un derecho, no una invasión", "Las vidas negras importan, ningún ser humano es ilegal", "No al odio y al racismo institucional", "Asesinatos de Melilla, justicia. Castigo a los culpables", "¡Regularización ya!" y "Masacre de Melilla, no son muertes, son asesinatos".
En un comunicado, la asociación de descendientes de africanos Afromurcia en Movimiento, que coordina la protesta, eleva la cifra de víctimas en la valla melillense que separa España de Marruecos a "al menos 45" y denuncia que "hasta la fecha el ministro del Interior, Grande Marlaska, sigue sin dar explicaciones del operativo que acabó con esas vidas el 24 de junio, que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, calificó de 'bien resuelto'".
Los concentrados también se hicieron eco del "asesinato" el 12 de septiembre de una joven migrante de África occidental en la playa marroquí de Akhfennir, cerca de Tarfaya y frente a las costas canarias, próxima al Sahara Occidental, a quien dispararon en el pecho las fuerzas policiales marroquíes "en la nueva línea de trabajo de las políticas de externalización de las fronteras de Europa y España".
Se remiten a lo anunciado por la activista de Caminando Fronteras Helena Maleno ese mismo día en Twitter, a lo que la Asociación Marroquí de Derechos Humanos de Nador añadía la muerte de un hombre marroquí en el mismo incidente, en el que según los presentes se abrió fuego contra 35 personas, 15 de ellas mujeres y 2 niños, que intentaban embarcar en una patera hacia España "ante la falta de vías legales y seguras para migrar".
Si estos incidentes pasasen en países centroamericanos, con emigrantes europeos, creo que no saldrían noticias culpatorias de malos tratos ni de devoluciones en caliente.¿ Y porque?, pues porque nos comerían vivos.