El centro de la ciudad de Melilla se llenó este jueves de turistas procedentes de un crucero que atracó durante unas horas en el puerto. Se les pudo ver consumir en las tiendas de la ciudad y en los bares. Karim, encargado del local 'Navona' ha dicho a El Faro que hace un balance positivo de esta visita. "No es para tirar cohetes, pero es algo. Se notó en la ciudad el ambiente porque había gente en la calle y a mí me vinieron dos grupos, yo no me puedo quejar la vedad", aunque ha señalado que sí que ha habido gente que ha criticado que este grupo de turistas solo ha venido a pasear. "Pero todo lo que venga a la ciudad es positivo, lo malo es que venga la chusma, pero que venga gente a pasear y gastar dinero es bueno, ¡que vengan hasta leones", ha expresado Karim.
Por el contrario, Malika, encargada de 'La Andaluza', ha asegurado que no le repercutió en nada la visita del crucero. "La verdad es que por aquí no han pasado, solo lo han hecho para conocer lo que es Melilla, pero para consumir aquí no han pasado, como si nada, como si no hubiesen venido", ha apuntado. Malika expone que ella está acostumbrada a trabajar con extranjeros y que sus visitas se suelen notar, pero ayer no tuvo a ningún cliente del crucero. "No merece la pena, sinceramente, no nos han hecho consumición, por lo menos a nosotros" y tuvieron más bien clientes de Melilla que de fuera. A pesar de que siente que ha sido "una decepción", cree que deberían seguir viniendo cruceros a Melilla "para dar un poquito más de vida a la ciudad porque le hace falta bastante".
Otro hostelero de la ciudad, que ha preferido permanecer en el anonimato, ha explicado a El Faro que la visita de estos turistas ha sido una "chapuza", porque estos últimos ya tienen un servicio de catering en el crucero y solo han consumido en la ciudad lo mínimo pactado con las agencias para los que han ido en grupos.
Respecto al comercio, Juan, encargado de la zapatería 'Rual', hace un balance positivo porque además de pasear por las calles, "que siempre da alegría al centro", entraron en los comercios, ha apuntado. Y es que señala que con los cruceros anteriores no sucedía. "El ambiente que se creó en el centro con grupos musicales fue idóneo; entraron a mirar y fueron buscando cosas de calidad".
Una comerciante que vende objetos de decoración ha explicado a El Faro que entraron solo tres o cuatro turistas del crucero a su establecimiento, el resto fueron españoles. Cree que no ha sido una visita fructífera, aunque sí que ha notado que esta vez se han quedado más tiempo en la ciudad que en cruceros anteriores, en los que no llegó a vender nada. Señala que las veces que llegan solo para unas horas que las pasan visitando la ciudad y sin que tengan tiempo para comprar. También ha señalado que las personas jóvenes son más caprichosas que las de avanzada edad, que son el perfil de las que vinieron.
Lola, dueña de una tienda de joyería del centro, ha explicado que solo entraron a mirar la tienda unos dos turistas. "Yo no sé al resto del comercio, pero a nosotros nada; entró un matrimonio, preguntaron por una cosita, no les vino bien y se fueron, no sé a los demás cómo les habrá ido", ha dicho Lola. Aún así, ha valorado positivamente el ambiente que hubo en el centro de la ciudad. "Había un poquito de ambiente en la calle, da alegría de ver gente que últimamente estamos escasos, pero en lo demás nada". Ha expuesto que cuando ha habido otros cruceros tampoco han ido a comprar, que como mucho miran el escaparate. "Un crucero muy bonito, pero ahí se acabó".
Cambiar la imagen de la ciudad
Enrique Alcoba, presidente de la Confederación de Empresarios de Melilla (CEME), hace un balance positivo porque cree que lo importante es dar una buena imagen a la ciudad alejada de que la que suele haber a nivel internacional por el tema migratorio. "Nosotros, desde la Confederación de Empresarios y la Asociación de Comerciantes lo valoramos positivamente, entendemos que ya no es que venda uno un poco más, un poco menos, de que podamos vender un pantalón más, un bolso más; se trata de dar una imagen de la ciudad que creo que se ha dado y las opiniones que hemos encontrado es que se han llevado una buena imagen de la ciudad, yo creo que si hay que valorarlo es un notable alto", ha apuntado.
Gota a gota se llena el vaso.
Estamos en el comienzo de un buen futuro.
Lo del vaso medio lleno o medio vacío, es inevitable .Pero lo importante, es tener un vaso que poder llenar.
Gracias a todos los que han trabajado el día de ayer por el bien de esta maravillosa ciudad.