Un repaso a las últimas cifras publicadas por el sistema VATar Covid-19 de vigilancia microbiológica de aguas residuales, implementado por el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico en julio de 2020, evidencia que después de la última Semana Santa (del 10 al 16 de abril) hubo un "aumento" de los restos de material genético del virus SARS-CoV-2 en Melilla.
En concreto, de acuerdo con la actualización semanal número 91 (del 17 al 23 de abril de 2022) del VATar Covid-19, la ciudad autónoma registró un alza de entre 0,4 y 1 unidades logarítmicas de diferencia (0,61) con respecto a la Semana Santa.
Mientras, en la última semana de abril (del 24 al 30), la número 92 del sistema, en Melilla los restos de material genético del virus SARS-CoV-2 tuvieron una variación "estable" (-0,13), que es cuando ha habido de -0,4 a 0,4 unidades logarítmicas de diferencia.
Si bien todavía el VATar no ha dado a conocer las mediciones correspondientes a lo que va del mes de mayo, en la segunda mitad de abril el 100% de los resultados obtenidos en las aguas residuales locales correspondieron a la variante de SARS-CoV-2 conocida como Ómicron BA.2.
No obstante, el aumento de la incidencia acumulada de covid en los últimos días permite prever que los restos del virus en las aguas residuales y de baño en la ciudad, también deben de haberse incrementado.
Por otro lado, aunque la vigilancia microbiológica en aguas residuales se ha venido utilizando como indicador epidemiológico para la detección de la circulación del virus en la población casi desde el inicio de la crisis sanitaria, cobra mayor importancia en esta "nueva normalidad", en la que el sistema de vigilancia epidemiológica nacional se centra en monitorear a los mayores de 60 años y otras personas vulnerables.
De hecho, en un contexto en el que se habla del comienzo de una séptima ola, métodos como el análisis de las aguas residuales o la cantidad de test diagnóstico vendidos en las farmacias pueden ayudar a mostrar una imagen más precisa de la propagación del covid en la actualidad.
De acuerdo con los especialistas, este sistema es una herramienta sensible, incluso cuando la prevalencia de covid presenta niveles bajos en la población. El VATar Covid-19 analiza semanalmente las muestras que se recogen a través de 52 depuradoras urbanas de España, por lo que sirve como alerta temprana de brotes en zonas concretas.
Desde noviembre de 2020
Amén de que la primera determinación de coronavirus en aguas residuales se hizo en Melilla del 22 al 28 de noviembre de 2020, o sea, a partir de la semana número 21 del sistema VATar Covid-19, una revisión al registro histórico de esta herramienta demuestra que el "aumento" de restos de covid en estas aguas coincide con los puntos más álgidos de la pandemia en la ciudad autónoma.
A pesar de que hubo varias semanas en 2021 en las que se comprobó una "disminución" (de -1 a -0,4 unidades logarítmicas de diferencia con respecto a la semana previa), no ha habido hasta ahora ninguna "disminución significativa" (<-1 unidades logarítmicas de diferencia) en Melilla.
Es más, la presencia de coronavirus en las aguas residuales del territorio se ha mantenido "estable" en 34 de las 71 semanas en las que se ha medido este indicador en la ciudad.
Así, Melilla ha registrado un "aumento" de restos de covid respecto a los siete días anteriores en la semana 26 (del 10 al 16 de enero de 2021), en la 29 (del 31 de enero al 6 de febrero de 2021), y en la 36 (del 21 al 27 de marzo de 2021).
El año pasado también hubo un incremento en la semana 40 (del 18 al 24 de abril), la 42 (del 2 al 8 de mayo) y la 45 (del 23 al 29 de mayo); y luego, en pleno verano: la semana 53 (del 18 al 24 de julio) y la 58 (del 22 al 28 de agosto).
Un alza se marcó asimismo a finales de 2021, o lo que es lo mismo, en la semana 64 (del 3 al 9 de octubre), la 70 (del 14 al 20 de noviembre), la 71 (del 21 al 27 de noviembre), la 74 (del 12 al 18 de diciembre), y la 75 (del 19 al 25 de diciembre).
En tanto, desde que comenzó a aplicarse este sistema en Melilla, solo se ha registrado un "aumento significativo" (>1 unidades logarítmicas de diferencia) en dos ocasiones: en la semana 48 (del 13 al 19 de junio) y en la 67 (del 24 al 30 de octubre).
Por otra parte, desde el aumento cifrado en la segunda mitad de diciembre de 2021, la presencia de covid en las aguas residuales se mantuvo "estable" hasta las semanas 81 (del 6 al 12 de febrero) y 82 (del 13 al 19 de febrero), en las que se marcó una "disminución".
Después, en este 2022 estos resultados se mantuvieron estables hasta la semana 85 (del 6 al 12 de marzo) en que hubo otra "disminución"; y la semana 91 (del 17 al 23 de abril), es decir, la que le siguió a Semana Santa, en que existió el citado "aumento".