Ayer, la plaza multifuncional acogió el primer Riders Festival de Melilla, una iniciativa impulsada por la Viceconsejería de Juventud. Durante todo el día, decenas de melillenses se acercaron para compartir espacio con skaters profesionales y artistas urbanos. Además, se celebró un torneo de baby basket en el que participaron 120 niños y medio centenar de personas se inscribieron en las distintas actividades programadas.
Iniciativas como la de ayer son muy beneficiosas para la sociedad de nuestra ciudad, sirven como punto de encuentro de los ciudadanos y muy especialmente de los jóvenes.
Hay que potenciar este tipo de actos, donde la juventud pueda disfrutar de entretenimientos sanos en espacios públicos. Los jóvenes deben darse cuenta de que Melilla puede ser una ciudad amigable para ellos.
Actuaciones como el Riders Festival se antojan indispensables si queremos animar a una juventud que a veces se encuentra desesperanzada. El mensaje pesimista que algunos se empeñan en lanzar sobre Melilla puede llegar a calar en las futuras generaciones y es importante que la ciudad tenga un color atractivo para ellos.
En menos de un mes, tendremos la Game Zone, otro evento orientado a los más jóvenes y que también servirá para dibujar una Melilla moderna y con futuro.