Los hechos fueron provocados cuando el agente intentó identificar a un sospechoso l Otros presentes acudieron en ayuda del posible delincuente.
Los agentes de Seguridad españoles tuvieron que cerrar ayer el puesto fronterizo de Farhana durante un “breve periodo de tiempo” ante el intento de agresión a un policía nacional que pretendía identificar a un sospechoso, que podría estar en busca y captura. Al pedir la documentación a esta persona, ésta gritó pidiendo auxilio, llamada a la que acudieron otros presentes para evitar que el agente llevara a cabo su labor de control documental.
Según indicaron a El Faro fuentes policiales, ningún agente resultó herido a causa de este altercado, pero los efectivos allí presentes no fueron capaces de arrestar a la personas que intentaron identificar. Los hechos ocurrieron sobre las 11:00 horas de la mañana de ayer.
Efecto llamada
Lo reseñable de este caso es que, al pedir el policía la documentación a la persona para confirmar si estaba realmente en busca y captura, ésta pidió ayuda a los trabajadores del comercio atípico que había en el paso, asegurando que le querían detener.
Ante estas palabras, se formó una aglomeración y, por ello, los agentes españoles decidieron cerrar Farhana hasta que lograsen controlar la situación, priorizando la seguridad de los efectivos y demás personas que estaban en ese momento en el puerto.
El grito de ‘auxilio’ de la persona a la que intentaron identificar, por tanto, sirvió de efecto llamada para que los porteadores acudieran en su ayuda y en contra de las Fuerzas de Seguridad.
Barrio Chino
Este hecho recuerda, salvando las distancias, al que ocurrió en la frontera de Barrio Chino el pasado 19 de enero. En esta ocasión, dos guardias civiles y un policía nacional resultaron heridos al intentar identificar a otro sospechoso. Varios porteadores acudieron a ayudarle y golpearon a los agentes.