Melilla se ha volcado una vez más en el Día de Todos los Santos en recuerdo de los seres queridos que han fallecido. El trasiego de ciudadanos al camposanto fue fluido durante todo el día.
Centenares de melillenses acudieron ayer al Cementerio municial de la Purísima con motivo de la celebración del Día de Todos los Santos. La tradición sigue arraigada entre los ciudadanos y cada 1 de noviembre acuden al camposanto para recordar con afecto a sus seres queridos. Es un día de recogimiento y tristeza para muchos, en especial para los familiares que han fallecido recientemente.
Melilla se vuelca cada año en esta festividad, y en esta ocasión, el puente de cuatro días ha hecho que el trasiego de ciudadanos se haya repartido entre varios días. No obstante, el responsable del Cementerio, Mariano Carrelero, afirma que “cada vez viene menos gente”. Esta apreciación no coincide con la de los floristeros que tienen sus puestos a la entrada del camposanto o en las calles aledañas, ya que es fácil ver colas ante los establecimientos para comprar un ramo de flores o una corona para depositar en sepulcros y nichos.
En los días previos, muchos melillenses aprovecharon la tranquilidad del fin de semana para adecentar y limpiar las tumbas con el fin de que ayer martes lucieran su mejor aspecto.
Pero no solamente los mayores son los más fieles a la tradición, sino que esta costumbre también se transmite de generación en generación y por ello, en el día de ayer, se pudo ver a muchos niños que, junto con sus padres, acudieron al cementerio. Una buena oportunidad para que los pequeños de la casa no olviden a sus mayores fallecidos.
El tiempo acompañó durante toda la jornada, a pesar de que las lluvias de la pasada semana hacían presagiar lo contrario. Así, con un sol radiante y una temperatura cálida, los melillenses se animaron a acudir al camposanto que, sin duda, además de ser el lugar de descanso de más de 67.000 almas, es un espacio cargado de historia, escrita por cada una de estas almas.
Para algunos, una visita al Cementerio de la Purísima puede resultar toda una visita ‘cuasiturística’ a tenor de las personalidades que allí descansan. A ello ha contribuido la apertura al público de los panteones militares, pero, en sepulcros y nichos también descansan otras personas destacadas a lo largo de la historia de Melilla.
Es por ello que hoy, los representantes del Gobierno y Asamblea de Melilla rendirán homenaje a los alcaldes Rafael Ginel, Antonio Díez Martín, Eduardo León Solá, Luis Cobrero Acero o a Cándido Lobera, presidente de la Junta de Arbitrios.
También se recordará hoy a las víctimas del Polvorín, a José Romero Girado, fallecido en accidente laboral, al igual que Emilio Martín, en accidente aéreo, o Francisco Gil Castro, fallecido en 1982 ahogado intentando salvar a varios bañistas. También se depositará un ramo de flores en homenaje a las víctimas de la Estación de Bombeo, a las del accidente aéreo de 1998 y las del depósito de aguas un año antes.
Cabe destacar que el puente de Todos los Santos se ha desarrollado con normalidad en las inmediaciones del camposanto melillense gracias a la constante vigilancia de la Policía Local. El tráfico ha sido fluido durante todo el fin de semana y no se han producido problemas de consideración, según informó a este diario ayer uno de los agentes. Sin embargo, algunos ciudadanos sí se han quejado de la falta de plazas de aparcamiento.
En el camposanto melillense descansan los que dieron su vida por la patria
En estos días, los melillenses han tenido la oportunidad de visitar los Panteones militares que han estados abiertos al público con motivo de la festividad, ayer, de Todos los Santos, y hoy el Día de los Difuntos. La Comandancia General de Melilla (Comgemel) decidió abrir al público estos panteones militares no solamente por la historia que guardan entre sus muros sino también para que los ciudadanos puedan rendir un sentido homenaje a los que dieron su vida por España.
Hoy a partir de las 13:00 horas la Comgemel celebrará un acto de homenaje al que asistirán las primeras autoridades civiles y militares.
Un mensaje eterno
Muchos de los sepulcros del camposanto melillense lucen sus mejores galas en estos días. Las flores adornan tumbas y nichos depositadas por los familiares que echan de menos a sus seres queridos. Para algunos la expresión de ese amor lo plasman en mensajes tan sentidos como los que muestran las fotografías.