Una calabaza de 19 kilos y medio ha sido la ganadora del octavo concurso agrícola de la granja escuela 'Gloria Fuertes'. El ejemplar no solo ha logrado ser la más grande de esta edición del certamen sino que ha conseguido marcar un récord histórico. La hortaliza ha sido obra de Francisco Santos Castro y Manuel Santos Castro.
Junto a esta calabaza gigante los participantes cultivaron otras tantas de gran tamaño aunque ninguna que alcanzara estas dimensiones, que le han valido para alzarse con el primer premio. Tal y como ha explicado uno de los usuarios de los huertos, es una calabaza muy trepadora e invasora que necesita una buena superficie de terreno para crecer.
Pero las dimensiones de la hortaliza ganadora no ha sido la única novedad de este año, ya que en esta ocasión se ha querido introducir una nueva categoría. Se trata de la calabaza más singular, cuyo premio ha sido para Juan Manuel Casamitjana y Francisco Pérez Marchena.
En su caso, sembraron una variedad muy característica de zonas como Sicilia. Es una calabaza que presenta una mezcla de sabores muy originales y que se puede cultivar en poco terreno. De una sola semilla de esta variedad pueden germinar unas siete calabazas. Con una buena tierra, incluso pueden alcanzar los dos metros de largo.
Los ganadores han recibido material para huerta compuesto de semillas de temporada y abonos naturales para continuar cultivando estas hortalizas en los huertos urbanos. Los premios han sido entregados esta mañana por el consejero de Medio Ambiente, Daniel Ventura, y el técnico del parque, Pedro Paredes.
Este último ha resaltado que el trabajo que se ha conseguido es fruto del esfuerzo mantenido durante un largo periodo de tiempo. La plantación de las semillas o plántulas se realizó durante la primavera de este año siguiendo las directrices de la agricultura ecológica. A lo largo de este tiempo, los usuarios de los huertos sociales las han cuidado y mantenido hasta su recolección en el mes de septiembre.
El concurso agrícola de calabazas lleva organizándose desde hace ocho años con el objetivo de promover y potenciar la actividad física, el compañerismo, la búsqueda de variedades autóctonas y el contacto con el medioambiente de los mayores. Objetivos, según ha destaco Ventura, por los cuales este concurso es muy importante para su consejería.
"Vamos a seguir apostando porque las personas mayores tengan un envejecimiento activo y saludable. El Gobierno tiene que crear las condiciones adecuadas para que eso se pueda producir", destacó.
Únicamente se puntúan las que tienen un aspecto sano y comestible, sin grietas, orificios o podredumbres que lleguen a perforar el orificio central.
Los huertos sociales para mayores se encuentran distribuidos en aproximadamente 70 parcelas en 50 metros cuadrados y un total de 4.000 metros cuadrados. El número de usuarios es de 250 personas aproximadamente incluyendo las parcelas cedidas a entidades locales como Autismo Melilla, Feafes, Teama, el centro Gámez Morón, SPAD-Imserso o la asociación NEES, entre otras.
En este sentido, el titular de Medio Ambiente ha asegurado que desde su consejería se está trabajando para ampliar los montos de huertos urbanos, con la previsión de poder tenerlos disponibles el próximo año. Esto se produce debido a la gran demanda que están teniendo este tipo de parcelas por parte de los mayores.
"Necesitan y quieren invertir parte de su tiempo en este tipo de actividades y nosotros lo vamos a hacer", añadió Ventura.
Por su parte, Pedro Paredes ha querido recordar a los usuarios de este huerto que ya no se encuentran entre nosotros.
Al mismo tiempo, ha resaltado la dificultad que supone el cultivo de estas hortalizas, puesto que no se utiliza ningún producto fitosanitario para su abono, ni ningún otro químico.