La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) alertó ayer de que hoy entra en vigor el Código Penal Militar que se aplicará a los agentes de la Benemérita.
Desde la organización mayoritaria en el Instituto Armado recuerdan que esta “medida represora” se aprobó con los votos en solitario del Partido Popular.
Aunque es pública y notoria la oposición de AUGC a la aplicación del Código Penal Militar a los guardias civiles, la asociación volvió ayer a manifestar su rechazo al “recrudecimiento de las medidas represoras por parte de la cúpula” del Cuerpo.
Para los representantes de AUGC es “una norma innecesaria que supone un gran retroceso en los derechos sociolaborales de los trabajadores” de la Guardia Civil.
La asociación cree que la nueva disposición “sitúa a los guardias civiles en la indefensión más absoluta” ya que está redactada de forma tal que se hace imposible saber con certeza en qué supuestos se aplicará el Código Penal Militar.
Hasta ahora, los agentes de la Benemérita sólo se sometían al Código Penal Militar en caso de guerra, estado de sitio o misiones militares. En cambio ahora, la nueva ley deja la puerta abierta a que cualquier guardia civil pueda ser condenado a una pena de prisión por una discusión de trabajo.
Coartar la libertad
Según AUGC esto ya se ha producido. Para demostrarlo, cita el ingreso en la cárcel militar de Alcalá Meco, en febrero de 2015, de un agente que fue condenado a cuatro meses de prisión por un exceso verbal con un superior.
También critica AUGC que la nueva norma considere al director general de la Guardia Civil como autoridad militar.
Además tipifica el delito de injurias a la Guardia Civil y la organización interpreta que esto se ha hecho para coartar la libertad de expresión y el derecho a reunión y manifestación de las asociaciones profesionales de guardias civiles.
Pese a la entrada en vigor del Código Penal Militar que se aplicará a los guardias civiles, AUGC reitera que continuará luchando por la defensa de los derechos sociolaborales de los agentes de la Benemérita hasta que se reparen los agravios comparativos con el resto de policías españolas.