Esta mañana se ha celebrado un pleno extraordinario en la Asamblea de Melilla, en el cual se han aprobado las Cuentas Generales de la Ciudad Autónoma, correspondientes al ejercicio del año 2022. Estas se trasladarán al Tribunal de Cuentas para su estudio.
La propuesta ha contado con los 8 votos favorables de los grupos de Coalición por Melilla (CpM) y Partido Socialista, mientras que el resto de formaciones con representación en la cámara se han abstenido.
Esta votación se ha desarrollado en el contexto de una sesión plenaria extraordinaria de carácter urgente, la cual se desarrolló de forma tranquila y sin incidentes de ningún tipo.
Este punto fue presentado al pleno por la Comisión Especial de Cuentas, donde en una sesión ordinaria celebrada el día 21 de septiembre se sometieron a votación las cuentas generales del pasado año y el resultado fue afirmativo, siendo estas aprobadas por mayoría simple con los votos de CpM y la abstención del resto de los grupos con representación.
La propuesta presentada especificaba la aprobación definitiva de las cuentas generales de la Ciudad Autónoma de Melilla del año anterior, la publicación de las mismas en el Boletín Oficial de la Ciudad y el traslado de las citadas cuentas al Tribunal de Cuentas, de acuerdo con lo previsto en los artículos 212.5 y 223.2 del Real Decreto Legislativo 4/2004, del 5 de marzo; para su análisis por parte de este órgano para que determine si han cumplido con la normativa establecida.
Debate
Comenzó con el turno de palabra en esta sesión el diputado del Grupo Mixto, Amin Azmani, quien calificó a estas cuentas como "llamativas", pues afirmó que si bien el presupuesto del 2022 era de 362 millones de euros, finalmente acabó siendo de 534 millones. "Estamos hablando de la cifra más alta de la historia de nuestros presupuestos, un incremento del 48 % respecto al ejercicio anterior".
El diputado consideró que este dinero no se había utilizado para resolver los problemas económicos de la ciudad. Además, pese a que estas cuentas se trasladarán al Tribunal de Cuentas para su consiguiente estudio, Azmani consideró un hecho llamativo algunas partidas como el caso de la destinada a las necesidades de los ciudadanos, donde del presupuesto inicial de 576.000 euros, no se ejecutaron 554.000; o el caso del presupuesto destinado al fracaso escolar, en la que se destinaron 600.000 euros, sin embargo se ejecutaron 200.000. "Una auténtica barbaridad, sabiendo la realidad que sufre nuestra ciudad en materia de fracaso escolar".
El diputado pidió explicaciones a la anterior corporación para que explicase las razones por las que, denunció, no se cumplió con el presupuesto. Azmani sostuvo que pese a que Melilla tiene una tasa de paro del 21 %, en el presupuesto destinado a la Escuela Taller se dejaron 10 millones de euros sin ejecutar. Además, en materia económica, el localista recordó que el IPSI de importación cayó un 33 % en una dinámica que, dijo, había que frenar.
"Esto es una auténtica barbaridad. Es cierto que algunas partidas se ejecutaron durante el ejercicio del 2023, pero durante el año 2022 hubo algunas que incluso se perdieron".
Finalmente, Amin Azmani anunció la abstención de su formación, Somos Melilla, porque, pese a que las cuentas se trasladarán al Tribunal de Cuentas para el correspondiente análisis que considere si se ha cumplido la normativa y los criterios de transparencia, han querido expresar su rechazo a la forma en la que se ejecutaron los presupuestos en el año 2022.
Por alusiones, la portavoz de CpM, Dunia Al-mansouri respondió a Amin Azmani, a quien acusó de no saber en qué consistía el trámite que estaban debatiendo.
Al-mansouri manifestó que la aprobación de las cuentas constituía un trámite obligatorio y necesario para poder solicitar el préstamo de las inversiones que aún están pendientes. Asimismo, recalcó que las cuentas no eran un documento político, sino un documento técnico donde se refleja la ejecución presupuestaria y donde se plasma dicha ejecución en la contabilidad.
Respondiendo al diputado del Grupo Mixto, la ex consejera de Hacienda dijo que una cosa era el presupuesto y otra la totalidad que se incorpora, pues sostuvo que todos los años se añaden remanentes de partidas que son plurianuales o partidas con un compromiso del ejercicio anterior y que deben implementarse.
"No siempre el Gobierno tiene la capacidad de ejecutar al ritmo que le gustaría y yo creo que el señor Conesa podía haberse dado cuenta de ello, después de los 20 años del Gobierno del Partido Popular en los que todos los años se tenían que incorporar partidas".
Por otro lado, Al-mansouri hizo referencia a la acusación de Azmani de la supuesta inversión escasa destinada a la lucha contra el fracaso escolar por parte del anterior Gobierno, manifestando que en la pasada legislatura se produjo en Melilla "el mayor gasto en Educación de todo el territorio nacional", así como las mayores inversiones para el mantenimiento del empleo y las empresas, con partidas de millones de euros. No obstante, recalcó que no se pudieron ejecutar en un único ejercicio presupuestario, debido a la imposibilidad administrativa de llevarse a cabo.
Por último, la diputada cepemista dijo que estas inversiones podrán ser ejecutadas con el nuevo Gobierno para mejorar la infraestructura de la ciudad además del mantenimiento del empleo.
La ronda del turno de palabra la cerró Amin Azmani, para afirmar que los presupuestos deben someterse a la acción política y se debe tener la responsabilidad moral de valorar la gestión del anterior Ejecutivo local, añadiendo que en el ejercicio presupuestario del 2022 hubo un remanente enorme y más del 48 % de modificaciones en los presupuestos.
Azmani denunció que numerosas partidas presupuestarias no llegaron a ejecutarse, debido a unos requisitos excesivamente complicados. Además de manifestar que el anterior Gobierno no dio respuesta a las partidas sociales de los ciudadanos. así como la falta de respuestas a la mayoría peticiones de ayudas sociales.
El diputado recordó que el anterior Gobierno de la Ciudad pidió dos créditos por un valor de casi 100 millones de euros sin que ello haya repercutido en la vida de los melillenses y pidió que se dejara de poner a la pandemia como excusa.
"Espero que no utilicen la excusa del Covid, porque creo que durante la etapa de la pandemia la ciudad ha recibido presupuestos históricos".
Responsabilidad
Por parte del grupo popular en la Asamblea, el consejero de Hacienda, Daniel Conesa, recordó que estas no eran las cuentas del Gobierno actual y sostuvo que, por responsabilidad institucional, su formación no se opondría a la aprobación de las mismas. Añadiendo que de sobra era conocida la opinión del Ejecutivo respecto a la gestión presupuestaria de la pasada legislatura.
También recordó que será el Tribunal de Cuentas el que realice los análisis e informes correspondientes sobre estas cuentas.