Medio centenar de personas viajó este fin de semana a Alhucemas, donde tiempo atrás se desarrolló su vida, estaban sus viviendas, sus familiares y sus amigos. Dentro de las actividades que realiza la Asociación de Antiguos Residentes de Villa Sanjurjo-Alhucemas, este año la delegada de Melilla, Mª Luisa Ortega, con la inestimable ayuda de Juani Mira a petición de los muchos asociados, han organizado un fin de semana en esta bonita ciudad, vecina de Melilla. El viaje comenzó a las 10 de la mañana del pasado sábado, en autobús y con cuarenta personas, la mayoría de ellos de Melilla, aunque también había algunos de la península. Les acompañaba entre otros Juan Antonio Vera Casares, presidente del Centro Unesco de Melilla, y el conocido artista Francisco Peinado.
En Alhucemas, los antiguos residentes encontraron todo muy cambiado. Algunos de ellos no habían vuelto en quince, veinte o cincuenta años. Sus casas convertidas en hoteles, bancos y grandes pisos, eran irreconocibles, pero la esencia del pueblo, sus paisajes, playas y sus gentes continúan con el mismo encanto que ellos recordaban.
El delegado de la UNESCO en Alhucemas y delegado de la Asociación de Antiguos Residentes, Saddik Abdelkrim, sirvió de anfitrión a toda la expedición en todos los rincones más emblemáticos que ahora tiene la ciudad.
El Taller de Mujeres que realiza bellos tapices, donde unen la tradición con la modernidad. La nueva mezquita, la más grande de todo el norte de Marruecos, una muy bonita construcción. Los nuevos paseos marítimos en la playa de la Cebadilla, donde se produjo el desembarco de Alhucemas en 1925.
Una visita al cementerio español para buscar a sus familiares fallecidos, paseo por el centro de la ciudad. Pero lo más emotivo fue la visita el domingo a la iglesia, que llenó de alegría al párroco franciscano al ver todos los bancos de su templo llenos de feligreses, algo inusual desde hace mucho tiempo. Algunos de los visitantes se habían bautizado en esa iglesia o se casaron en ella.
Otro dato anecdótico fue encontrarnos en misa con unos jóvenes cristianos de Costa de Marfil que están estudiando Hostelería y Turismo en Alhucemas.
Un viaje para recordar y con ganas de volver. El domingo, después de misa, habían preparado un almuerzo en uno de los chiringuitos de la playa de Sfiha, desde donde se puede ver la Isla de Alhucemas.
El lunes, 23 de abril, dos miembros de esta asociación, residentes en Málaga-Miguel y Santiago La Calle, expusieron sus obras en la sala de la UNED en una colección de fotografías del Rif, de la época del Protectorado con el nombre ‘De Norte a Norte’. Y el próximo fin de semana del 27 al 29 de abril, los antiguos residentes tendrán la reunión anual que se celebra en Playa de Aro (Cataluña).