El presidente de la Fundación 'Melilla Ciudad Monumental', Francisco Díaz, ha informado este martes que los dos únicos kioscos de Melilla la Vieja serán trasladados al almacén general de la ciudad hasta nuevo aviso. La noticia llega después de varias idas y venidas con los hosteleros encargados de ambos establecimientos, que han estado cerrados al público durante un largo periodo de tiempo.
Los kioscos de Plaza de Armas y la Plaza de Estopiñán llevan tiempo siendo el foco de atención. Después de meses cerrados y una vez que ambos contratos han finalizado, la Ciudad Autónoma expresó su intención de endurecer las cláusulas del contrato para evitar que volviera a ocurrir lo mismo. Ambos establecimientos han estado cerrados al público durante bastante tiempo, impidiendo, por un lado, que otros hosteleros pudieran hacerse cargo de ellos y, por otro, que los melillenses pudieran disfrutar de ellos, sobre todo en la época estival.
Ahora que ha acabado la concesión, los hosteleros que estaban al mando de ambos kioscos se niegan a entregar la llave. Francisco Díaz ha informado de que, por el momento, los dos kioscos serán trasladados al almacén general de la Ciudad Autónoma. Primero se llevarán el de Plaza de Armas y después el de Pedro de Estopiñán. "Otro episodio más de la telenovela", ha señalado el popular, quien ha lamentado que la Administración local haya tenido que recurrir a esta medida.
El presidente de la Fundación lamenta que la ciudadanía tenga que pagar justo por pecadores a causa de la mala gestión de los dos hosteleros, que no han desarrollado la actividad económica a la que se habían comprometido. "Los kioscos son una concesión", ha insistido visiblemente enfadado. "Ya está bien, hombre. Se está jugando con el administrador".
De esta manera, ha criticado abiertamente que los kioscos hayan estado cerrados durante un largo periodo de tiempo (el de Pedro de Estopiñán hasta año y medio), "fastidiando" a los ciudadanos y "jactándose" de ello. "Me parece lamentable", ha añadido Díaz, quien espera "que la Administración utilice todo el peso que pueda" sobre los hosteleros responsables.
"A mí me fastidia mucho porque parece que está fastidiando a la Ciudad Autónoma y no, están fastidiando a la ciudadanía, que no puede venir aquí a tomarse un café o una cerveza y disfrutar de este espacio", ha lamentado. "La concesión se hace para desarrollar una actividad económica. Si no lo va a desarrollar, suéltalo; deja que la pueda desarrollar otro".
Por el momento, la Administración no contempla ninguna alternativa a los dos kioscos de Melilla la Vieja, según ha informado el presidente de la Fundación.
Paco calla más que cuenta, habría que ver porqué no sueltan las llaves. A ver q chanchullos hay por medio