El ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha recordado que actualmente se está tramitando un nuevo contrato marítimo. De hecho, se han abierto ya algunos pliegos y todo indica que se han presentado dos compañías grandes como Trasmediterránea y Balearia, aunque el ministro indicó que desconocía lo abordado en la mesa de contratación. Ábalos explicó que conoce las críticas que ha recibido el nuevo pliego para este contrato marítimo, pero lo ha defendido. Subrayó que las frecuencias de los barcos, aunque han bajado, son las adecuadas en esta situación de pandemia y cubren la demanda. No obstante, recordó que es un contrato de un año y se puede revisar.
Ábalos destacó que se cuenta con 11,4 millones de euros para este contrato marítimo que, por primera vez, incluye tres líneas tras la declaración de obligación de servicio público (OSP) para la ruta con Motril.
El ministro de Transportes aseveró que se refuerzan los mecanismos, no solo para asegurar una conectividad entre Melilla y la península, sino para garantizar la igualdad entre los tres puertos andaluces del mar de Alborán.
Ábalos reconoció que es “conocedor” de las críticas que ha levantado este contrato marítimo, pero defendió que el presupuesto “multiplica por tres” el gasto que estaba destinado a esto.
“Es verdad que se reducen las frecuencias de 14 a 12, pero es mucho más la reducción de la propia situación que la pandemia ha provocado. No hay planes de cruce del estrecho y la propia movilidad ha bajado mucho. Con lo cual las frecuencias entendemos que resuelven cualquier problema de conectividad y además si se tiene en cuenta que se ha incorporado una línea más”, aseveró el ministro de Transportes.
En este sentido, también hizo hincapié que el contrato es un año y es “revisable y renovable” y por ello, insistió en que “se puede adecuar perfectamente al momento que corresponda y esperamos que sea pronto una vez superada la pandemia”.
Y añadió que toda la movilidad ahora en España está dependiendo de la demanda, pero se garantiza siempre un poco más de la demanda real de los ciudadanos por parte del ministerio.
Los barcos
En cuanto a si se conocían ya las empresas que están concursando para el contrato marítimo, Ábalos aseveró que nunca ha estado en una mesa de contratación y lo desconoce. Lo que sí destacó es que al Gobierno central le ha tocado mejorar la oferta, por ejemplo, en la ampliación de los años de los buques. Indicó que se ha pasado de la limitación de 20 a 25 años. Y apuntó que se adoptó esa decisión, “no por depreciar la calidad del servicio, sino por garantizar la concurrencia”.
El ministro comentó que estos servicios no han contado con el interés de las compañías privadas y eso ha llevado al Ejecutivo central a este tipo de contratación pública. Pero al respecto del aumento de años, el nivel de exigencia sí que será el mismo que hay en otros pliegos de contratos marítimos anteriores.
El ministro dice que se puede ampliar de otra forma el puerto
Los Presupuestos Generales del Estado ya no recogen la ampliación del puerto de Melilla que planteaba el PP. Ábalos indicó que “todos los planes que se puedan plantear, más allá del deseo, deben tener una viabilidad clara”. El ministro comentó que se trata de inversiones importantes y deben acertar mucho en la viabilidad. Además, remarcó que en este tipo de cuestiones “interesa recabar a operadores privados para que los puertos funcionen porque la inversión pública por sí misma no puede impulsar la actividad portuaria”. En este sentido, Ábalos planteó que cuando se pensó en la ampliación del puerto se tenía un horizonte diferente al actual y, no solo por la pandemia, que ha reducido aún más la actividad portuaria de Melilla, sino por “otras políticas que están afectando a lo que se esperaba en ese momento”. De hecho, recordó cómo el puerto de Algeciras se está viendo afectado por el de Tánger y en Melilla se cuenta con otro al lado, como es el de Nador. Por ello, apeló a “redimensionar” todos los planes de actuación.
En Ceuta, apuntó, que se han hecho rellenos en el puerto y se ha derivado allí actividades nocivas o insalubres para estar dentro de la población.
“Se pueden aplicar soluciones de ampliación del puerto según las necesidades de la propia ciudad”, añadió en el caso de Melilla.
Ábalos insisitó en que no se descarta nada, pero subrayó en que “los planes de inversión deben ir acompañados de planes de viabilidad, bien fundamentados, que permitan amortizar la inversión y lograr el objetivo que se quiere”.