Hoy comienza en la ciudad autónoma la reordenación de los pasos fronterizos con Marruecos, iniciativa que busca conseguir una mayor fluidez en los tránsitos de porteadores, así como ganar una mayor seguridad, sobre todo tras los incidentes registrados desde principios del presente mes, con grandes aglomeraciones de personas y vehículos en Beni Enzar y Farhana y el lanzamiento de objetos como piedras y botellas contra los efectivos de Policía Nacional y Guardia Civil.
El cambio más destacados que comenzará a aplicarse a partir hoy afecta a los porteadores.
Quienes se dedican a este tráfico de mercancías podrán cruzar a la ciudad autónoma única y exclusivamente por el paso del Barrio Chino, quedando el resto de puestos (Beni Enzar y Farhana) libres de la actividad de las personas que trasladan bienes en grandes fardos entre Melilla y Marruecos.
Con la aplicación de esta medida, los porteadores del país vecino dedicados a lo que se denomina ‘comercio atípico’ se verán obligados a trasladar toda su carga por el Barrio Chino, situado a unos dos kilómetros de Beni Enzar. Este último está más cerca de las naves del polígono industrial Sepes, motivo por el que los porteadores prefieren cruzar por este puesto.
La Delegación del Gobierno ha estimado necesario desplegar esta mañana a agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil a modo de refuerzo en Beni Enzar para impedir que el tránsito de fardos con mercancías continúe llevándose a cabo por esta zona y se canalice correctamente hacia el Barrio Chino.
Reacción de Delegación
Esta medida fue anunciada a comienzos del presente mes, días después de que un agente de Policía Nacional que trabajaba en Beni Enzar recibiera un ladrillazo en el pecho que fue arrojado desde la ‘tierra de nadie’. Después de este incidente, tuvieron lugar otros sucesos parecidos, casi todos en el mismo paso fronterizo, aunque también hubo altercados en Farhana, donde llegaron a lanzarse botellas contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Ante tal situación, el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, defendió la necesidad de reordenar el tránsito de mercancías procedentes del ‘comercio atípico’ hacia el Barrio Chino. Asimismo, anunció que la Ciudad Autónoma iba a prestar su colaboración para adecuar este paso fronterizo y que el tránsito de fardos fuera más ágil, cómodo y seguro. Aún no se ha dado a conocer con detalle cómo funcionará el Barrio Chino a partir de ahora. No obstante, la semana pasada el presidente autonómico, Juan José Imbroda, garantizó que dicho puesto será “más limpio y seguro”, tanto para los porteadores como para los agentes de Policía y Benemérita que trabajan allí a diario.