El presidente visitó ayer la estatua de Estopiñán colocada en El Pueblo, tras su restauración.
La estatua de Estopiñán restaurada ya ha vuelto a su lugar en la plaza que lleva su nombre. El presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, visitó ayer El Pueblo para comprobar de primera mano cómo ha quedado el monumento (que ya estaba colocado el martes por la tarde) tras la restauración. Ocho meses después de que le amputaran uno de los brazos, la imagen ha regresado intacta a la ciudad. Imbroda aseguró que lo que sucedió fue algo “absurdo” que no conducía a nada, porque era evidente que aunque le arrancaran un brazo, éste sería sustituido y la estatua volvería, tal y como ha hecho, a su lugar.
El presidente recordó que Pedro de Estopiñán llegó a Melilla por encargo de los Reyes Católicos, tras el pacto de la entrega de nuestra ciudad después de la caída del Reino de Granada. “Aquí estamos desde 1497 ininterrumpidamente y aquí vamos a estar”, aseguró el presidente.
El máximo dirigente del Gobierno local destacó, además, que durante la entrega de Melilla no hubo ninguna batalla y que de hecho Estopiñán era un contable de la Casa de Medina Sidonia y no un guerrero. “Venía a administrar y no a batallar”, apuntó.
Imbroda aseguró que ha vencido la lógica y que la vuelta de Estopiñán es la respuesta a una acción “absurda”. El presidente resaltó que no han querido hacer ninguna inauguración oficial y que la visita de ayer sólo pretendía comprobar el estado en el que había quedado la imagen. En este sentido, señaló que ha quedado “estupendamente” gracias al gran trabajo del escultor Mustafa Arruf. “Se ha repuesto lo que nunca debería haber faltado”, apostilló.
El presidente aclaró, además, que el coste del arreglo de la estatua, que terminó de restaurarse en una fundición de Granada, ha sido de 6.000 euros. Asimismo, apuntó que no temen que vuelva a sucederle algo y aclaró que no van a poner ninguna medida especial de seguridad. “Nosotros no podemos tener una vigilancia constante en cualquier monumento de la ciudad”, apuntó Imbroda, que indicó que cree que lo sucedido se debió a “un calentamiento de verano” y que no cree que ocurra eso nunca más.
El máximo dirigente del Gobierno local señaló que ellos hicieron lo que tenían que hacer en su momento, que fue denunciarlo ante los juzgados como ataque contra el patrimonio de la ciudad y reponerlo.
El robo del brazo
El brazo de Estopiñán fue robado el pasado mes de noviembre, la acción fue reivindicada por el antiespañol y líder del Comité para la Liberación de Melilla y Ceuta, Said Chramti, la escultura de Estopiñán. El propio Chramti aseguró días después que la extremidad amputada a la escultura por cuatro hombres con pasamontañas, según los testigos, fue entregada al Ministerio de Cultura de Marruecos, a modo de donación hecha por el Comité antiespañol que lidera.
No obstante, nunca se mostraron fotos en las que se viera al ministro de Cultura recibiendo el obsequio. Desde el Gobierno local no quisieron dar demasiada importancia al asunto y aseguraron en todo momento que se trataba de una gamberrada. Nunca estuvo clara la fecha de regreso de Estopiñán a Melilla, aunque lo que si repitieron en varias ocasiones tanto Imbroda como otros miembros del Ejecutivo, fue que la estatua estaría colocada en la plaza para el Día de Melilla, el 17 de septiembre, algo que ya se ha cumplido.