La Base Alfonso XIII acogió ayer la despedida a las tropas que se desplazarán a territorio iraquí en noviembre. La forman 300 soldados, 200 de ellos destinados en nuestra ciudad
En noviembre, un contingente de unos 300 militares españoles se desplazará a Irak para instruir y adiestrar a soldados del ejército de ese país. La misión durará seis meses y estará encabezada por el Grupo de Regulares de Melilla, que aportará el grueso de la expedición con más de 200 integrantes
Ayer, la explanada Héroes de España de la Base Alfonso XIII fue el escenario del acto de despedida del esta fuerza, cuyos componentes irán viajando hasta territorio iraquí en distintos grupos.
El comandante general de Melilla, Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu, presidió esta ceremonia de despedida, a la que asistieron las principales autoridades militares y civiles de la ciudad. Entre éstas últimas estuvo el presidente del Gobierno local, Juan José Imbroda, así como el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani.
Fuerza en formación
En la explanada de la base se desplegaron los soldados que serán enviados a Irak. Aparte de los pertenecientes al Grupo de Regulares de Melilla, también intervendrán soldados de la Comandancia General de Baleares. Junto a estos militares desfiló la Nuba de Regulares, cuyos miembros, como es habitual, lucían las capas blancas que les caracterizan.
El comandante general pasó revista a la tropa en formación, que vestía uniforme de combate. Tras ello, el coronel Ángel Castilla, jefe del Grupo de Regulares y máximo responsable de esta misión en Irak, recibió el guión de mando de parte de la Hermana Mayor de la Real y Franciscana Congregación de Nuestra Señora de la Victoria.
El acto concluyó con el desfile ante la tribuna de autoridades, en el que marcharon los soldados que irán a Irak seguidos de la Nuba.