Los pequeños del campamento de Rostrogordo organizaron ayer un pequeño teatro en la plaza Menéndez Pelayo.
Los niños del campamento de Rostrogordo se convirtieron ayer en actores por un día. La plaza Menéndez Pelayo fue el escenario en el que los pequeños protagonizaron una obra de teatro con la que además de divertirse trataron de concienciar a los melillenses de la importancia de cuidar el medio ambiente. La coordinadora de esta actividad, Adeli Miralles, explicó que el ecologismo es uno de los temas con los que trabajan durante los campamentos de verano, en los que participan niños de entre 3 y 14 años, y que con la puesta en escena de ayer era por una parte una apuesta por el reciclaje, ya que los disfraces de los pequeños estaban hechos con objetos reutilizados, y por otra parte de concienciación. Así, indicó que pretendían que todos los que pasaran ayer por la plaza salieran con la idea de que el cuidado del entorno es una obligación de todos. En el espectáculo, el público pudo ver la figura del un árbol que hablaba tanto con los espectadores como con los niños, así como las bolsas de basura que peleaban con los contenedores de reciclaje. Los 'super R' entraron en acción para recoger todos los desperdicios y llevarlos al contenedor correspondiente, demostrando a todos los presentes que reciclar es más fácil de los que muchos creen. Según apuntó Miralles, el hecho de que los más pequeños aprendan la importancia de cuidar el medio ambiente es clave para el futuro, ya que de ellos dependerá que con el paso del tiempo el reciclaje y el respeto al entorno sea algo totalmente asumido por la sociedad. La coordinadora dijo que un total de 20 niños está participando en este campamento que se desarrolla en el Fuerte de Rostrogordo durante los meses de julio y agosto, y en el que pueden inscribirse por quincenas, para un mes o para el verano completo.