El Banco de Alimentos de Melilla ha sido reconocido oficialmente como una asociación de utilidad pública por el Ministerio del Interior, convirtiéndose en la primera organización de su ámbito en la ciudad en recibir esta distinción. Así lo anunció este miércoles la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, quien destacó la importancia de este reconocimiento para mejorar la labor que realiza la entidad en apoyo a las familias vulnerables.
El acto contó con la participación de Isabel Basset, directora del área de Agricultura, y Pedro Paredes, responsable del Banco de Alimentos, quienes explicaron los beneficios que este reconocimiento traerá tanto a la organización como a las personas que dependen de ella.
Según explicó Sabrina Moh, el Banco de Alimentos ha mantenido una colaboración constante con la Delegación del Gobierno en la distribución de alimentos para las familias más necesitadas. La distinción de utilidad pública supone un respaldo a la labor que desempeña la organización en Melilla, permitiéndole acceder a nuevos beneficios fiscales y a mayores oportunidades de financiación.
"Este reconocimiento beneficiará directamente a las familias melillenses y permitirá seguir avanzando en la atención a los más vulnerables", afirmó Moh. La delegada del Gobierno subrayó que este título es un hito importante, ya que hasta ahora ninguna otra asociación de la ciudad había recibido dicha distinción.
Por su parte, Isabel Basset, directora del área de Agricultura, recalcó el trabajo conjunto que su departamento ha realizado con el Banco de Alimentos desde el inicio del programa de ayuda alimentaria. Destacó que, pese a la existencia de ayudas económicas como el ingreso mínimo vital, hay familias que no pueden acceder a estos recursos por razones burocráticas o personales, y es ahí donde entra la labor del Banco de Alimentos.
"Esta certificación refuerza la posición del Banco de Alimentos y facilita que pueda recibir más donaciones y ayudas para seguir con su labor solidaria", señaló Basset.
Proceso largo pero exitoso
El presidente del Banco de Alimentos de Melilla, Pedro Paredes, manifestó que la organización llevaba años trabajando en la solicitud de esta certificación. El trámite requirió la recopilación de múltiples informes y memorias de actividades, además del respaldo de la Delegación del Gobierno y la Consejería de Políticas Sociales.
Según indicó Paredes, la distinción fue publicada el pasado mes de febrero en el Boletín Oficial del Estado (BOE) a través de la Orden de Interior 205 de 2025, del 24 de febrero. "Es un orgullo haber logrado este reconocimiento tras casi 20 años de trabajo", afirmó el responsable de la organización.
Paredes destacó que la certificación no solo legitima la labor del Banco de Alimentos, sino que también mejorará su capacidad para recibir apoyo del sector privado. Explicó que, con la reciente reforma de la Ley de Mecenazgo en 2023, las empresas y particulares que realicen donaciones a entidades de utilidad pública podrán beneficiarse de deducciones fiscales, lo que incentiva las aportaciones.
"En apenas dos semanas desde la publicación del reconocimiento en el BOE, dos importantes cadenas de supermercados de la ciudad han firmado convenios de colaboración con el Banco de Alimentos para donar excedentes de alimentos en perfecto estado", detalló Paredes.
Compromiso del Banco de Alimentos
El Banco de Alimentos de Melilla forma parte de la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL), una organización que reúne a 54 bancos de alimentos en toda España. La federación fue galardonada en 2008 con el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia, en reconocimiento a su labor humanitaria.
En 2015, el Banco de Alimentos de Melilla recibió el Premio al Mérito Social, consolidando su papel como una entidad clave en la lucha contra la pobreza en la ciudad.
El trabajo de la organización se basa en la coordinación con las autoridades y en la colaboración con empresas, voluntarios y ciudadanos. "El apoyo de la Delegación del Gobierno, la Consejería de Políticas Sociales y los medios de comunicación ha sido fundamental para que podamos alcanzar este reconocimiento", destacó Paredes.
Gracias a la certificación de utilidad pública, la organización podrá ampliar su red de donantes, mejorar su gestión y fortalecer su impacto en la comunidad. "Esto nos permitirá seguir garantizando que los alimentos lleguen a quienes más los necesitan, evitando duplicidades y mejorando la eficiencia de nuestra labor", concluyó el responsable del Banco de Alimentos.
El reconocimiento del Banco de Alimentos de Melilla como entidad de utilidad pública representa un avance significativo en la asistencia a familias en situación de vulnerabilidad.
La certificación permitirá a la organización reforzar su financiación, mejorar su operativa y ampliar su impacto social, consolidándose como un pilar clave en el tejido solidario de Melilla.
Tanto las autoridades como los responsables del Banco de Alimentos coincidieron en que esta distinción es una gran noticia para la ciudad, ya que garantiza que los recursos lleguen a quienes más lo necesitan y fomenta la colaboración entre instituciones, empresas y la ciudadanía.
Con esta certificación, el Banco de Alimentos de Melilla inicia una nueva etapa en su compromiso con la sociedad, asegurando que su labor humanitaria siga creciendo y beneficiando a más personas en el futuro.
