La jefa de la Unidad de Coordinación contra la Violencia sobre la Mujer de la Delegación del Gobierno en Melilla, Laura Segura, ha subrayado el papel de España como uno de los países líderes en avances en igualdad de género. Durante su intervención en la jornada ‘Mujeres, profesión y liderazgo: Conocimientos y retos en las Ciencias Sociales y Jurídicas’, organizada por la Comisión de Igualdad, Conciliación e Inclusión de la Facultad de Ciencias Sociales y Jurídicas de la Universidad de Granada (UGR) en Melilla, Segura advirtió sobre el rearme del machismo y la necesidad de seguir luchando por la equidad.
Segura destacó que, actualmente, España se mantiene como el cuarto país más avanzado en igualdad de género dentro de la Unión Europea. Sin embargo, insistió en que los avances logrados no son garantía de permanencia y que es fundamental consolidarlos y acelerar el camino hacia la eliminación de las desigualdades existentes. "Debemos ser conscientes del momento complicado que vivimos, con una ola reaccionaria que pone en riesgo lo alcanzado", afirmó.
En su discurso, hizo referencia a una célebre frase de la filósofa feminista Simone de Beauvoir: "Bastará una crisis política, económica o religiosa para que los derechos de las mujeres vuelvan a ser cuestionados", alertando así sobre los peligros de retrocesos en materia de igualdad.
Desafíos pendientes
Segura resaltó que la vida de las mujeres sigue siendo más difícil que la de los hombres en múltiples ámbitos. Según indicó, los estudios realizados muestran que las desigualdades de género siguen vigentes en diversos sectores de la sociedad, algo que, en su opinión, no deja margen para la interpretación.
Asimismo, enfatizó el trabajo de las mujeres en posiciones de liderazgo institucional y político en temas de igualdad y violencia de género, afirmando que su labor se suma a los esfuerzos de generaciones anteriores y sirve para allanar el camino a futuras líderes. "El feminismo nos cambia para siempre, nos interpela y lo llevamos a todas partes. Donde hay una feminista, ese espacio es mejor y más justo", afirmó.
Para Segura, la lucha feminista no solo se basa en denunciar las injusticias y opresiones que sufren las mujeres, sino también en cuestionar los privilegios que mantienen la desigualdad. En este sentido, defendió la importancia de que las mujeres puedan conciliar sin culpas, demostrar su valía sin trabas y desenvolverse en espacios tradicionalmente dominados por hombres.
En su intervención en el Salón de Actos del Campus de Melilla, Segura explicó el funcionamiento de las Unidades de Coordinación contra la Violencia sobre la Mujer, dependientes del Ministerio de Política Territorial y de Función Pública y del Ministerio de Igualdad. Estas unidades, ubicadas en las Delegaciones del Gobierno en cada Comunidad Autónoma y Ciudad Autónoma, tienen como principal objetivo mejorar la eficacia y personalizar la respuesta a las mujeres víctimas de violencia de género y a sus hijos e hijas.
Además de la violencia de género, estas unidades trabajan en la atención y prevención de otras formas de violencia contra las mujeres, como la trata con fines de explotación sexual, los matrimonios forzados y la mutilación genital femenina. "Somos una red de coordinación y seguimiento de los recursos y servicios de la Administración General del Estado, en colaboración con las administraciones autonómicas y locales", explicó.
Avances en Melilla
Segura destacó que, en Melilla, la Unidad de Coordinación se ha consolidado como un referente en la lucha contra la violencia de género y la promoción de la igualdad. Gracias a este trabajo, se han desarrollado diversas mesas de seguimiento desde 2020, como la Mesa de Sensibilización y Prevención de la Violencia de Género, la Mesa de Atención e Intervención a las Víctimas y la Mesa de Protección a las Víctimas.
Además, recordó que en 2020 se firmó un Protocolo de Colaboración entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la Policía Local de Melilla para la protección y seguimiento de las víctimas de violencia de género. A raíz de este acuerdo, la Mesa de Protección dejó de convocarse para evitar la duplicidad de funciones.
Más allá de la coordinación institucional, Segura resaltó la importancia de la colaboración con organizaciones no gubernamentales y asociaciones que trabajan con mujeres en la ciudad. En este sentido, explicó que se han desarrollado mesas de trabajo específicas con estas entidades para proponer mejoras, detectar y prevenir situaciones de violencia de género, así como abordar otras formas de violencia contra las mujeres.
Para concluir, Segura subrayó la necesidad de mantener y reforzar los avances en igualdad de género, enfrentando los retos actuales con determinación. "Las mujeres feministas sabemos crear equipos, actuar con empatía pero también con firmeza, y transformar los espacios en los que estamos presentes. Sin embargo, también recibimos mucha violencia por nuestra exposición", concluyó.