Muy contrariado. Así acabó el técnico del equipo melillense el partido en Ponferrada. Un choque que resumió de este modo: “Ha sido muy injusto Veníamos en muy malas condiciones, con una situación muy mala en la última semana. Hemos jugado un partido fantástico, el mejor a nivel defensivo de todo el año. Controlamos a sus mayores amenazas, sin permitir tiros cómodos. Hemos controlado prácticamente todas las situaciones, que es algo que nos estaba costando mucho. Pero en el tercer cuarto ellos han tenido muchísimo acierto con jugadores que no son habituales en la línea de tres, especialmente con Morales. Sin embargo, en ataque hemos tenido muy poco acierto. Fallamos cosas muy claras debajo del aro y no hemos metido un tiro de tres abierto en todo el partido. Tuvimos el partido para nosotros. Y es más, la última defensa ha sido perfecta, pero el balón le cayó a Hierrezuelo después de casi recuperarlo nosotros y lo mete. Tenemos que seguir en esta línea, porque jugando y defendiendo así nos van a ganar muy pocos partidos”.
Mikel Garitaonandia habló de momentos claves en los que su equipo no fue capaz de encauzar el encuentro cuando lo tenía en su mano: “Para romper el partido había que anotar algo. Hemos fallado tiros muy claros por falta de energía. Creo que hemos hecho un 5 de 31. Por eso el Clínica Ponferrada llegó con vida al descanso. Y luego se metió en el partido con el acierto de tres a la salida del intermedio”.
Por último, el preparador del equipo melillense hizo una visión de conjunto de lo acontecido hasta ahora en el campeonato liguero: “Está siendo una temporada de locos. Nunca había vivido en quince años lo que estoy viviendo este año. Hemos tenido dos meses de no poder entrenar. Hemos tenido una baja por gripe y en el calentamiento Stilma se nos queda sin poder jugar. Tres jugadores estuvieron con fiebre la semana pasada. No estamos teniendo continuidad y es muy injusto, porque el equipo tiene mucho más. Pero no podemos poner excusas”, concluyó el técnico del conjunto melillense.
“Premio al trabajo del equipo”
Muy satisfecho acabó el entrenador del cuadro berciano, Oriol Pozo, más aún porque en las últimas semanas se le habían escapado varios partidos del mismo modo que ganó éste, en la última jugada: “Es asombroso cómo puede cambiar una canasta el estado de ánimo. Es un premio al trabajo del equipo, no sólo de hoy, sino de las últimas semanas. Ha habido muchas alternancias en el marcador. Defensivamente creo que hemos estado a un nivel excelente. En ataque nos han colapsado. No hemos tenido un buen día en el tiro, pero mejoramos en otros aspectos”.
La clave la analizó así el preparador tarraconense: “Ha sido un partido muy cerrado y con poco ritmo. Tras el descanso logramos abrir más el juego, hacer más transiciones y sacar más faltas. Ellos no nos han dejado correr. Los detalles han sido claves. Han tenido tres o cuatro posesiones para ponerse por delante en las que estuvimos muy bien, encajamos una canasta a trece segundos del final y luego, en la última acción, fue un cara o cruz y sí ha entrado. Hay que valorar el tiro de Hierrezuelo, pero quiero valorar la determinación de Samar para no dar el balón por perdido y la determinación de Harguindey de no tirar en los instantes finales y dejar tras un pase a Hierrezuelo liberado para anotar la canasta definitiva”, concluyó su comparecencia ante los medios de comunicación el entrenador catalán de la escuadra ponferradina.