El mes de noviembre fue el más seco en Melilla desde 1961, año en que comienzan los registros de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), junto con el de 1967 y 1981, ya que no llovió nada. Además, fue el tercero más cálido de la serie histórica con una temperatura media de 18,7 grados, lo que implica una anomalía térmica de +1,7 grados sobre la media. De hecho, de los 30 días del mes, 27 registraron una temperatura media por encima de la media de la temperatura de referencia, que es de 17 grados. Tan sólo los días 1, 12 y 13 tuvieron una temperatura media más baja. El mes de noviembre más cálido de la serie histórica fue el de 2022, con una anomalía de +2,3 grados y que alcanzó una temperatura media de 19,3 grados. Así, el mes de noviembre en Melilla tuvo una catalogación como de muy cálido y muy seco.
En cuanto al conjunto del otoño meteorológico –que comprende los meses de septiembre, octubre y noviembre-, tuvo un carácter de extremadamente cálido y muy seco. En concreto, fue el cuarto más cálido y el 17º más seco. La temperatura media fue de 21,8 grados (+1,3 grados sobre la media), aunque no llegó a los 22,4 grados de 2022, que, con una anomalía de +1,9 grados, tiene el récord de ser el otoño más cálido de la serie histórica. Por lo que respecta a las precipitaciones, cayeron 40,5 milímetros, lo que supone un 37 por ciento de lo que tendría que haber llovido en esos tres meses. El otoño más seco fue el de 1969.
Predicción para el invierno
Este fin de semana entrará en España una masa de aire frío por los Pirineos que provocará un descenso generalizado de las temperaturas en todo el país. En Melilla, no será tan acusado como en el resto del país, porque, tal como explica el delegado de la Aemet en Málaga, Juan de Dios del Pino, conforme esa masa de aire frío va atravesando la península, “va perdiendo su singularidad”, por lo que, cuando llega a Melilla, la bajada no es tan grande. En cualquier caso, se espera un descenso de cinco grados en dos días (tres grados el domingo y otros dos grados el lunes).
Del Pino también ha informado de que el invierno probablemente sea más cálido y más seco de lo normal, con un 50 por ciento de probabilidad en ambos casos. En cuanto a temperaturas, el otro 50 por ciento restante se reparte en un 30 por ciento de que sea normal y un 20 por ciento de que sea frío. En las precipitaciones, habrá un 30 por ciento de probabilidad de que se ajuste a la media y un 20 por ciento de que sea considerado un otoño húmedo.