Ante las nuevas críticas de los ecologistas, el consejero de Medio Ambiente y Naturaleza, Daniel Ventura, ha subrayado la importante necesidad de despejar el cauce del río de Oro de toda vegetación por motivos de seguridad: “La desembocadura del río de Oro no se puede renaturalizar”, ha afirmado ante la insistencia de la asociación Guelaya Ecologistas en Acción.
“Respeto la opinión de Guelaya, pero no la comparto”, ha repetido Daniel Ventura, defendiendo, nuevamente, el desbrozamiento que la Ciudad Autónoma ha llevado a cabo en el cauce del río de Oro. Igualmente, ha insistido en que durante los trabajos no se ha retirado ninguna especie protegida, solo aquella vegetación que, en caso de lluvias torrenciales, podría generar problemas en el cauce.
El consejero de Medio Ambiente llama al “sentido común” en este asunto y recalca la importancia de continuar con los trabajos de desbroce y limpieza en la desembocadura.
En cuanto a las denuncias constantes de Guelaya, Ventura ha recriminado a los ecologistas que no fueran tan insistentes con el ‘ecocidio’ que se cometió en la zona ZEC de Aguadú durante las obras que el Ministerio del Interior llevó a cabo y en el que sí se vieron afectadas especies autóctonas y protegidas.
“Aquí no estamos quitando nada protegido”, ha subrayado el consejero, aludiendo nuevamente a la retirada, principalmente, de la especie invasora de cañaverales que abundaba en el cauce y que impiden que esté limpio.
Ambigüedad de la CHG
Por otro lado, el popular ha vuelto a poner sobre la mesa la “ambigüedad” con la que actúa la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) en este asunto, después de que primero dijera que la Ciudad Autónoma era la encargada de desbrozar el cauce para después interferir y decir que se necesita autorización para ello.
Esto ha provocado que, hasta que pasen los 20 días y la autorización esté publicada en el Boletín Oficial del Estado, no se podrán continuar con los trabajos. De esta manera, Ventura ha querido dejar claro a la ciudadanía que si Melilla sufriera una DANA y ocurriera algo similar a lo de Valencia, sería porque la CHG ha parado los trabajos que se estaban llevando a cabo.
“No podemos seguir desbrozando otras zonas que están igualmente muy sucias porque no tenemos todavía la autorización. (...) Como ciudadano, me sigue preocupando –y mucho– el estado del río”, ha declarado.