La ONG presenta un escrito para que Delegación no paralice los trámites.
La asociación humanitaria Pro Derechos de la Infancia (Prodein) presentó en la jornada de ayer una solicitud en la Delegación del Gobierno para que no se le retire el permiso de residencia a Jamal, el joven inmigrante que estuvo bajo la tutela de la Ciudad Autónoma hasta que se descubrió que su madre vivía en Melilla.
Según explicó a El Faro el máximo dirigente de la ONG, José Palazón, Jamal había obtenido desde su entrada en España dos permisos de residencia con una duración de dos años cada uno.
Actualmente se le estaba tramitando el tercero, válido para los próximos cinco años, pero, según Palazón, al haber renunciado la Ciudad Autónoma a la tutela del joven “es muy probable que Delegación cancele la gestión del permiso”.
Ahondando en esta cuestión, el máximo dirigente de Prodein recalcó que si Jamal consigue esta renovación para permanecer en España, incluso podría comenzar a tramitar la solicitud de un Documento Nacional de Identidad (DNI) para poder quedarse en el país de manera permanente.
También aseguró que la Consejería de Bienestar Social no informa correctamente a los jóvenes sobre sus posibilidades de conseguir la residencia en España, un hecho que Palazón ha puesto en conocimiento del Defensor del Pueblo.
Jamal ha perdido el piso de acogida en el que residía para irse a vivir con su madre. Sin embargo, las condiciones en las que reside ahora “dejan mucho que desear”, según informó el máximo dirigente de la ONG. José Palazón asegura se da la circunstancia de que en su nuevo hogar residen cuatro familias.
“Bienestar Social no se ha molestado ni en comprobar el estado de la vivienda antes de mandarlo a vivir con su madre”, lamentó. De igual modo, aseguró que para comer “él y su familia tendrán que vivir de la caridad”.