El consejero de Medio Ambiente, Daniel Ventura, ha tenido la ocasión de conocer en persona el funcionamiento de la planta de valorización energética que se encuentra en la incineradora y que gestiona la empresa pública Remesa. Durante la visita, que tuvo lugar este pasado lunes, el titular de la Consejería obtuvo toda clase de detalles relacionados con la explotación de las instalaciones de la mano del director de la planta, Miguel Moralejo al que agradeció "toda la atención y explicaciones enriquecedoras que me ofreció".
Ventura ha señalado que la incineradora utiliza "tecnología avanzada" para convertir los residuos sólidos de los melillenses en energía limpia y renovable. Según explicó, eso es posible a través de un proceso de combustión controlada mediante la que esos desechos son transformados en calor, electricidad y vapor, reduciendo significativamente su volumen y evitando la emisión de gases contaminantes en comparación con los métodos tradicionales de eliminación de residuos.
En ese sentido, el consejero popular manifestó que el objetivo principal de la planta de valorización energética de Remesa Melilla "es contribuir a la reducción de la dependencia de los combustibles fósiles y disminuir la cantidad de residuos que terminan en los vertederos".
Asimismo, comentó que, al aprovechar la energía contenida de los desechos, se promueve también la economía circular y se fomenta el uso responsable de los recursos naturales. Además de la generación de energía, la planta de valorización energética cuenta con sistemas de filtrado y control de emisiones de última generación para garantizar que los gases liberados sean tratados y cumplan con los estándares ambientales más estrictos. De acuerdo con el responsable político de Medio Ambiente, todo esto asegura que la producción de energía sea limpia y respetuosa con el medio ambiente.
Tras la visita, Daniel Ventura mantuvo un encuentro con los miembros de la Asociación de Hostelería, que recibieron una sesión de orientación y sensibilización sobre la importancia de la recogida selectiva y del reciclaje, y también el funcionamiento de la planta de valorización energética y la planta de transferencia de envases ligeros. Se les comunicó la obligación legal que tienen los establecimientos de este sector productivo de llevar a cabo la separación de residuos en origen y se les ofreció por parte de esta consejería la información y medios necesarios para materializarlo.
Igualmente, pudieron comprobar in situ la adecuada separación en los diferentes tipos de residuos. Una vez llegan a la planta de valorización energética y la planta de transferencia de envases ligeros, estos residuos reciclables son recuperados y enviados a los centros de reciclaje correspondientes.