La Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) de la Jefatura Superior de Policía de Melilla, en el marco de la operación policial denominada 'Donald', ha desarticulado un punto muy activo de venta de cocaína y hachís en el barrio de La Cañada de Hidum, gestionado por miembros de una misma familia.
Inicio de las Operaciones
La investigación se inició en el mes de marzo de 2023 al tenerse conocimiento de que se había establecido un punto de venta en la Carretera Hidum, cuya actividad diaria era muy elevada, constatándose, por medio de vigilancias y seguimientos, que en dicho punto se podía adquirir tanto cocaína como hachís entre las nueve de la mañana y las diez de la noche.
Modus operandi
Tras las correspondientes diligencias de investigación desarrolladas la UDYCO, se pudo corroborar que todos los miembros eran integrantes de un conocido clan familiar, quienes a primera hora de la mañana se desplazaban desde sus domicilios al barrio de La Cañada de Hidum, donde tenían garajes en los que almacenaban las sustancias estupefacientes y en los que cada investigado se encargaba de la recogida en su correspondiente 'caleta' de una determinada sustancia, estando la mayoría de la misma ya preparada para su venta en pequeñas dosis.
Una vez establecido el punto de venta y, tras colocarse los denominados aguadores para alertar de la presencia de indicativos policiales en la zona, eran los integrantes del clan quienes personalmente, al detectar un cliente, se acercaban a los vehículos que llegaban realizando una venta directa con el comprador, ya que portaban la sustancia en la mano o recogían la dosis de una especie de armario artesanal situado en la vía pública y que controlaban ellos, donde tenían ocultas el resto de dosis preparadas para su venta en esos momentos .
Asimismo disponían de varios vehículos aparcados en las inmediaciones del punto de venta pero alejado de la vía de tránsito principal, donde disponían de una mayor cantidad de ambas sustancias estupefacientes, listas para su venta, que usaban para reponer existencias, con la intención de portar durante la transacción la mínima cantidad posible y garantizarse el suministro continuo. Algunos de estos vehículos usaban matrículas falsas para dificultar la investigación de los agentes.
Fase de explotación de la operación policial
El pasado día 6 de mayo, procedió a la entrada y registro de dos domicilios y a la detención de dos de los investigados, que pasaron a disposición judicial por los delitos de tráfico de drogas, falsedad documental y pertenencia a grupo criminal, e interviniéndose más de tres kilogramos de hachís y 47 gramos de cocaína, además de dos vehículos, dos motocicletas, 12.000 euros, 590 dirhams y otros efectos.
La autoridad judicial decretó el ingreso provisional en prisión de los dos detenidos.
Muy bien, ¿y qué le va a pasar a esa gentuza narcotraficante magrebí? ¿Cárcel? ¿Deportación a su país de origen? ¡Los melillenses de siempre queremos soluciones YA!