El presidente del Banco de Alimentos, Pedro Paredes, está inmerso en la gran recogida de alimentos prevista para estos días de noviembre. Doce serán los supermercados que participen en este evento solidario y doscientos cincuenta los voluntarios que ayuden a sensibilizar de los clientes que acudan a los establecimientos alimenticios.
En el caso del supermercado Mercadona, la colaboración se hará a través de bonos. Es decir cuando el cliente va a pagar tiene la opción de donar una cantidad de dinero para el Banco de Alimentos. Posteriormente, la sumatoria de todas las cesiones se intercambian por tarjetas sociales de Mercadona. Posteriormente, el Banco entrega a una trabajadora social la cantidad aportada para que valore a qué familias se dan. “Eso sí, estas tarjetas sólo sirven para alimentos de primera necesidad”, señala Paredes.
Lo importante en esta ocasión es que esos cheques no solo podrán utilizarse en alimentos no perecederos sino también en frescos como carne y pescado. En definitiva, que se podrá hacer un carro completo de compra gracias a la decisión adoptada en tal sentido por los responsables de Mercadona.
Este año se ha optado de nuevo por la modalidad de donación económica en la que el cliente, en lugar de donar producto físicamente, hace una aportación monetaria en línea de caja (múltiplo de 1 euro). Las cantidades donadas por el cliente se transformarán íntegramente en alimentos y productos básicos, a través de la llamada Tarjeta Sociedad, la cual permite al usuario adquirir los productos que necesite (perecederos y secos) en nuestras tiendas Mercadona.
La donación en caja permite ajustar los pedidos a las necesidades reales de los beneficiarios finales de cada banco de alimentos y en el momento necesario, siendo mucho más eficientes. Además, dentro del compromiso de Mercadona con esta campaña solidaria, la compañía realiza una donación correspondiente al 10% del total donado por los clientes a través de las donaciones en caja.
La cosa funcionará de la siguiente manera: el cliente elige la cantidad que dona, múltiplo de 1€ hasta lo que quiera, y la entrega en la caja de su supermercado en efectivo o pagando con tarjeta, como prefiera. Aparecerá reflejado en su ticket de compra el importe íntegro donado en concepto de “Donación”. ¿Y cómo se transforman los euros en productos? Una vez finalizada la campaña se informa al Banco de Alimentos de Melilla del saldo recaudado en su provincia. Con ese importe, el banco realizará un pedido de Tarjetas Sociedad a Mercadona de manera tal que con ese sistema la empresa facilita a las familias y usuarios el acceso a productos frescos y secos, al darles la posibilidad de poder realizar la compra como un cliente más, logrando así una ayuda más integradora y adaptada a cubrir las necesidades básicas de quienes más lo necesitan.
Esta fórmula, además, permite suministrar alimentos y productos a estas entidades durante todo el año y no sólo en Navidad, ya que pueden comprar lo que necesiten, cuando lo necesiten, logrando una mejor gestión de la donación.
Desaparición del Fondo Europeo
El Banco de Alimentos tuvo que hacer frente a un inicio de año y primavera muy complicados, ya que la desaparición del Fondo Europeo de Ayudas a Familias Desfavorecidas repercutió en una mayor carga de trabajo para esta organización. Este año, el Banco prevé recaudar sobre doce mil kilos de alimentos para poder abastecer a cerca de tres mil seiscientas personas. “La cifra de personas necesitadas no se ha incrementado. Se mantiene el mismo número anterior y posterior a la pandemia. Lo que sí ha cambiado es el perfil de las personas que precisan ayuda. La inflación o la subida del precio de los alquileres han desembocado en que al Banco de Alimentos se acerquen familias que antes no tenían recursos, y que ahora no llegan a final de mes”.
Respecto a la solidaridad de los melillenses, Pedro Paredes indica que “Melilla es muy solidaria como el resto de España. Yo la solidaridad la divido en dos sectores: aquellos que donan alimentos, y los voluntarios que dedican cuatro horas u ocho de su tiempo para sensibilizar acerca de la importancia de ayudar”. En la actualidad, un círculo compuesto por veinticinco personas trabaja permanentemente con esta asociación, mientras cerca de doscientas cincuenta lo hacen de modo intermitente.