La socialista Rosa López Ochoa lamenta que el Ejecutivo del PP “esté jugando con el futuro de la ciudad y la necesidad de los melillenses para acceder a una vivienda”.
“Confiamos en la responsabilidad del nuevo Gobierno que quede conformado tras el 22 de mayo y en que podremos cambiar el panorama, porque el Gobierno del PP, que lleva diez años al frente de la Ciudad Autónoma, está llevando un sinsentido”. La secretaria de Ordenación del Territorio, Vivienda e Infraestructuras del PSME, Rosa López Ochoa, se refería a la falta de colaboración del Ejecutivo local con el Estado en lo relativo a los convenios de Vivienda así como a la “nefasta” política llevada a cabo por el equipo de Gobierno de Imbroda.
“Confío en que el nuevo Gobierno que se va a conformar tras las elecciones de mayo se preocupe por la ciudadanía y cumpla con sus competencias”, apuntó la dirigente socialista en una entrevista concedida a Onda Cero.
Y es que, tal y como relató López Ochoa, el convenio firmado entre la Ciudad Autónoma y el Estado –en su momento con el Ministerio de Vivienda, hoy Secretaría de Estado de Vivienda– “está parado porque desde el Gobierno local se han puesto trabas para que las partidas presupuestarias del Estado no vengan a la ciudad”.
La responsable de Vivienda del PSOE local se refería así a los 48 millones de euros que el Gobierno de España iba a aportar para la construcción de 600 viviendas. “El Ejecutivo Socialista sí cumplió con su parte del convenio pero está a la espera de terreno”, explicó. Tal y como contó Rosa López Ochoa, en la ciudad autónoma de Ceuta se han dedicado desde 1991 preparando terrenos, cumpliendo con su competencia municipal. En Melilla, sin embargo, no se han preparado terrenos, y “el Estado no tiene dónde edificar”. “El proceso, por tanto es más largo, porque hay que buscar terrenos que no están preparados y hay que recalificarlos”, explicó.
Como ejemplo de estas circunstancias, la socialista se refirió las 60 viviendas que el Estado va a construir en Gabriel Morales, terrenos del antiguo cuartel de Defensa, donde, por parte del Gobierno del PP, “también se han dilatado los trámites”, como en la licencia de obras, que junto con la recalificación del terreno, es una competencia municipal.
“La construcción de viviendas incide en el empleo. Llevar a cabo las 300 viviendas conllevaría entorno a 1.350 empleos directos, a los que habría que sumar los indirectos generados en las tiendas de muebles, cocinas, etc.”, señaló López Ochoa.
“Llevando a cabo el convenio estaríamos favoreciendo el empleo en la ciudad. La media es de 4,5 empleos directos por cada vivienda. Esto es, con estas primeras 60 viviendas podríamos estar hablando de unos 270 puestos de trabajo directos”, apuntó.
Sin embargo los obstáculos que se están poniendo desde el PP están perjudicando a la ciudad y a los melillenses. “Se viene vendiendo un discurso desde el PP de que el Estado no ha puesto ni un solo ladrillo. Es una comparación perversa”, indicó, al tiempo que lamentó que los populares estén “jugando con el futuro de la ciudad y la necesidad de los melillenses que quieren acceder a una vivienda”.