Además, reitera que su aplicación no es nueva, sino desde primeros de año, y que la bonificación que permitió reducirlas sólo tuvo el voto en contra de la Delegación del Gobierno.
La Autoridad Portuaria reiteró ayer que la subida de las tasas portuarias por embarque y desembarque de pasajeros obedece al cumplimiento de lo determinado en la nueva Ley de Puertos y Marina Mercante que entró en vigor el pasado 1 de enero. Según aseguró Arturo Esteban, desde entonces están en vigor las nuevas tasas que se aplican en 1,67 euros por pasajero en los barcos de las líneas con Melilla. Esteban reconoció que desconoce qué porcentaje de impacto tienen estas tasas en la nueva subida del 4,4% aplicada recientemente por Trasmediterránea sobre el precio de los billetes en nuestras líneas marítimas, pero señaló que si la compañía cobra más de la subida estipulada “podría estar incurriendo en un fraude”.
El presidente de la Autoridad Portuaria reprochó por demás al delegado del Gobierno, al secretario general del PSOE y a otros dirigentes de partidos como los de la UPyD, que “se intente crucificar” al organismo portuario, cuando el Consejo de Administración de la AP lo que ha hecho ha sido bonificar unas tasas previstas por ley en una cuantía de 3,32 euros, para rebajarlas hasta 1,67 euros, “con el fin de gravar menos al melillense” en el coste final de los pasajes de barco.
“Me pregunto si el delegado del Gobierno representa a su Gobierno o qué intereses defiende, porque debería saber -”es de primero de Derecho”m señaló Esteban- que las tasas e impuestos sólo pueden aplicarse por ley aprobada en el Parlamento. La Autoridad Portuaria -insistió- no ha puesto ninguna tasa, lo único que ha hecho es cumplir con la ley, algo a lo que estamos obligados”.
Para Esteban, no son tampoco de recibo las afirmaciones de Escobar o el socialista Muñoz, “cuando precisamente la bonificación de esas tasas se aprobó con un solo voto en contrario, en concreto el del representante de la Delegación del Gobierno en el Consejo de Administración, que por entonces era el diputado por CpM, Abderrahim Sellam”.
“¿A quién critican o qué critican?”, se preguntó Arturo Esteban, para quien resulta paradójico que se arremeta contra unas tasas “aprobadas por un proyecto de ley presentado por el Gobierno central del PSOE y aprobado por el Parlamento español”.
En su opinión, resulta lamentable que “haya quien esté empeñado en crear conflicto utilizando la técnica de la confusión, que por burda no deja de ser menos utilizada en esta tierra nuestra para intentar engañar a la población”.
Además, aseguró que la Autoridad Portuaria ha detraído 2 millones de euros de sus potenciales ingresos con su decisión de bonificar las tasas impuestas por ley y rebajarlas hasta 1,67 euros por embarque y desembarque de pasajeros.
Asimismo, informó de que Trasmediterránea tiene una subvención añadida del 25% en todas sus actividades en el puerto, por lo que el impacto de la tasa en el precio final de billete debe ser aún menor que el 1.67 euros finalmente aprobado de resultas de aplicar una bonificación.
Estación Marítima y tarifas
De otro lado, respecto de las nuevas tarifas que se aplicarán a partir del 1 de junio, cuando la concesionaria de la nueva Estación Marítima comience a operar, Esteban comentó que se trata igualmente de una consecuencia de la misma Ley de Puertos y Marina Mercante de 28 de agosto de 2010, “que nos obliga a privatizar el servicio con unos parámetros que fijan esas tarifas sobre el embarque y desembarque de pasajeros y vehículos”.
“Aquí no se ha privatizado la nueva terminal por capricho o porque pensáramos que era mejor hacerlo. Particularmente yo no me hubiera inclinado porque se privatizara, pero no había otra opción porque así lo mandaba la nueva ley en su art. 60”.
Las nuevas tarifas anunciadas gravarán con 2.99 euros el embarque y desembarque de pasajeros y con 8.99 euros cada embarque y desembarque de vehículos. “En esto -subrayó Esteban- no tiene nada que ver el coste de la Estación Marítima, porque es absolutamente indiferente al tratarse de una tarifas determinadas por la ley, que nosotros tendríamos que haber cobrado también para el caso de que finalmente no se hubiera privatizado el servicio”.
Esteban no se explica, por tanto, el motivo de unas críticas contra una legislación aprobada por el PSOE y el Gobierno central socialista, ni mucho menos contra una privatización cuyo pliego de condiciones fue aprobado por Puertos del Estado y el Ministerio de Fomento. Menos aún, insistió, cuando la adjudicación de la explotación de la Estación Marítima por parte del consorcio Hidro Holding se aprobó por unanimidad en un Consejo de Administración “en el que participan los representantes de Puertos del Estado y de la Delegación del Gobierno”.
“¿Cuándo se equivoca el Sr. Muñoz?”, se preguntó: “ ¿Ahora o antes cuando su partido también aprobó la privatización de la Estación Marítima? Lo que costó construirla es tan indiferente para esas tarifas como indiferente es para los melillenses lo que diga el Sr. Muñoz. Primero tendría que informarse para hablar. Preguntar”.
No obstante, respecto de la gravosa repercusión en casi 3 euros por pasajero y casi 9 por cada embarque y desembarque de vehículos, Esteban aseguró que la Autoridad Portuaria está trabajando para evitar que finalmente repercutan en los viajeros. No dio muchos detalles, pero todo apunta a que se intenta que dichas tarifas se asuman en el nuevo contrato de navegación marítima que el Ministerio de Fomento sacará a concurso para la línea con Melilla una vez que en septiembre próximo finalice el actualmente vigente con Acciona.
“Teniendo en cuenta que todo lo que hacemos cuenta con el informe preceptivo de Puertos del Estado y el Ministerio de Fomento, cuyo ministro es precisamente el secretario general del PSOE a nivel nacional y un insigne dirigente del Partido Socialista en nuestro país, como es Manuel Blanco, hay que tener mucho morro para criticarnos por aprobar unas tasas que cumplen lo previsto en una ley nacional y que nosotros además hemos bonificado, a costa de los ingresos posibles de la Autoridad Portuaria y con el único voto en contra del representante de la Delegación del Gobierno en el Consejo de Administración de la AP”, concluyó a modo de resumen Arturo Esteban.
“Lo lógico es que se informaran antes de intentar crucificarnos”
Arturo Esteban no escondió ayer su malestar por la forma en que la autoridad gubernativa o el secretario general del PSOE en Melilla han abordado públicamente las nuevas tasas portuarias y tarifas de futura aplicación a los usuarios de los barcos de pasajeros que operen en la nueva Estación Marítima. “Si no saben deberían preguntar porque nosotros no podemos poner impuestos, sino que es una ley estatal la que los marca y los impone. Lo único que hemos hecho ha sido rebajar una tasas que nos venían dadas aún a costa de detraer 2 millones de euros de los potenciales ingresos de la Autoridad Portuaria y este organismo no está precisamente para dejar de ingresar. Aún así lo hemos hecho para gravar menos a los melillenses”.
Marina Mercante se desmarca de las nuevas tasas y subidas
La Dirección General de la Marina Mercante se desmarcó ayer de la subida de los precios de los billetes de barco y emitió un comunicado en el que decía que son “rotundamente falsas las informaciones aparecidas en algunos medios de comunicación en las que se recogían afirmaciones de miembros del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Melilla indicando que la Dirección General de la Marina Mercante ha decidido que los precios de los billetes del contrato de línea de navegación de interés público Península-Melilla vayan a sufrir un próximo incremento del 4%”.
“En cuanto al precio por el uso de las instalaciones portuarias -añadía el mismo comunicado- conviene señalar que la Dirección General de la Marina Mercante no fija el incremento del mismo, sino que es el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria, cuyo presidente y mayoría de miembros son nombrados por el Gobierno de la Ciudad Autónoma, el que los ha establecido”.
Por último, subrayaba que “el contrato actualmente en vigor finaliza en septiembre y que fruto del esfuerzo del Ministerio de Fomento el pliego que regirá las condiciones del próximo contrato recoge las principales demandas del pueblo melillense, tanto las referidas a las condiciones técnicas de los buques como a las de prestación del servicio, lo que supondrá una significativa mejora de las comunicaciones marítimas de la Ciudad Autónoma”.
DATOS Y PREGUNTAS
Esteban “¿Por qué no se preocupan de las tasas en el Aeropuerto?”
“En este ardor por defender a los melillenses de las nuevas tarifas, por qué no se hace algo para que las tarifas aeroportuarias, de 4,41 euros en los vuelos de Melilla con Málaga, y de 8,86 euros en los de Málaga con Melilla, se reduzcan. ¿Es que el Aeropuerto ofrece más servicios que la Estación Marítima?”, comentó en tono de pregunta el presidente de la Autoridad Portuaria.
Pasajeros Sólo un 30% de los pasajeros de los barcos son residentes en Melilla
El total de casi 700.000 pasajeros que el pasado año utilizó las líneas marítimas con Melilla sólo en un 30% es residente en la ciudad. Aún así, Esteban aseguró que la Autoridad Portuaria no dudó en bonificar las nuevas tasas por embarque y desembarque de pasajeros para gravar lo menos posible el bolsillo de los melillenses.
A tener en cuenta
Tasas legales
La nueva ley de Puertos en su artículo 12 obliga a aplicar las tasas en 3,32 euros por embarque y desembarque de pasajeros, pero admite bonificaciones
Bonificación
El Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria rebajó las tasas a 1,67 euros con el voto en contra tan sólo de Sellam
Subida billetes
Esteban no se explica en qué medida inciden las nuevas tasas en el incremento de 4,4% realizado por Trasmediterránea en el precio de los billetes de barco
Cobrar de más
La Autoridad Portuaria bonificó unas tasas iniciales por ley de 3,32 euros para rebajarlas a 1,76 euros. Si la naviera cobra de más sería un fraude”, aseguró Arturo Esteban
Nueva terminal
Las tarifas anunciadas por la concesionaria de la nueva Estación Marítima también son consecuencia de la entrada en vigor de la nueva Ley de Puertos, que las prevé y que obliga a la privatización de las terminales portuarias por un gestor no público.