El consejero de Medio Ambiente, Hassan Mohatar, daba este jueves por concluidas las obras de peatonalización del triángulo modernista más importante de la ciudad, lo cual convierte al centro en un casco urbano acorde con los tiempos. Si miramos hacia la península vemos que la práctica totalidad de las ciudades han actuado decididamente en este sentido, lo cual no solo ha embellecido el entorno de sus lugares más emblemáticos sino que, además, han dado vida al comercio tradicional y a la hostelería.
Melilla se retrasó un poco en esa línea de progreso, pero al fin lo ha conseguido. Los melillenses ya tenemos a nuestra disposición un centro peatonal importante, que se extiende entre las plazas de Quevedo y Héroes de España buscando dar prioridad al peatón sobre los vehículos, que no podrán circular a más de 20 kilómetros por hora en ese sector. Se trata de una zona que está a la espera de saber también cómo le va a afectar las normas de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), pendientes de elaboración.
Está por decidir también qué va a pasar con los aparcamientos, si hay zona azul en General Marina o directamente se apuesta por tarifas muy reducidas en el parking de Isla de Talleres para que concentre el estacionamiento de vehículos pero, al mismo tiempo, no se afecte negativamente al comercio y la afluencia de melillenses al centro.
Quedan cosas por hacer, sin duda, pero se avanza considerablemente porque General Marina está a punto para iniciar las obras (se prevé que para comienzos del verano) y el proyecto de la Plaza de España se presentará en cuestión de días, después de algunas modificaciones introducidas en la idea inicial a instancias del Foro de la Movilidad.
Aparte de que la imagen queda muy reforzada y ya luce como cualquier otro punto de España con una modernidad incuestionable, el centro es un ejemplo de cómo las ciudades avanzan en dar espacio a los peatones por encima de los vehículos con anchas aceras, buena iluminación y dotación de mobiliario urbano acorde con las necesidades que se detectan, como las papeleras o los bancos.
Tampoco hay que perder de vista que las obras han permitido renovar el saneamiento, algo que resultaba ya imprescindible, dada la antigüedad de la red, que se cifra entre 30 y 40 años. Todo lo que sea potenciar el abastecimiento de agua a los vecinos será siempre bienvenido.
Pero nada de esto se habría podido sacar adelante sin un esfuerzo en la inversión. Desde que se puso en marcha el proyecto de peatonalización en la Plaza Héroes de España hasta este momento, se han empleado casi 5,5 millones de euros, con la ventaja de que un 80% ha sido financiado con fondos europeos.