El Ministerio del Interior anunció este Lunes Santo el inicio de los preparativos para el inicio de la Operación Paso del Estrecho (OPE), que se celebrará, como de costumbre, del 15 de junio al 15 de septiembre, lo que significa que a más tardar en el plazo máximo de dos meses estarán abiertas las fronteras de Melilla y Ceuta para permitir el tráfico de pasajeros de la península a Marruecos, pasando por las ciudades autónomas.
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ya lo había avanzado previo a su viaje a Marruecos, donde tenía previsto trazar la hoja de ruta para fijar las fechas de la reapertura de la frontera, pero también de la Operación Paso del Estrecho que si bien trae aparejadas molestias provocadas por la congestión del tráfico en Melilla, representa un balón de oxígeno para las navieras, los comercios y el puerto de la Ciudad.
Hay que apreciar la OPE en su justa medida porque hemos estado dos años sin ella y las gasolineras, los bares y las compañías marítimas han notado su ausencia en los 24 meses consecutivos que Marruecos dejó a los puertos españoles al margen de la Operación Paso del Estrecho.
El impacto de la falta de pasajeros en el puerto de Melilla no sólo lo ha notado la Autoridad Portuaria, también los melillenses que hemos visto cómo ha ido recortándose la presencia de compañías que trabajaban al margen del contrato marítimo porque la línea era rentable. Pero sin OPE no hay rentabilidad por lo que las navieras terminaron marchándose o reduciendo sus horarios como hizo FRS el otoño pasado.
Con la vuelta de los emigrantes marroquíes, los melillenses nos beneficiaremos previsiblemente de una mayor oferta de horarios y barcos para viajar a la península, pero también metemos en el mercado alrededor de 300.000 consumidores desde los puertos de Almería, Motril y Málaga, si se consiguen igualar las cifras del años 2018, previo al inicio de la pandemia del coronavirus.
De momento, los acuerdos del presidente Pedro Sánchez con Marruecos se están cumpliendo. El viernes pasado, Rabat autorizó a las navieras retomar el tráfico marítimo y los primeros en dar el paso serán los barcos que conectan el puerto de Algeciras con el de Tánger, una ruta que echa a andar este martes 12 de abril, en plena Semana Santa.
Ahora sólo queda por delante prepararlo todo al milímetro porque las noticias que llegan de China nos advierten de que el coronavirus no es todavía una pesadilla del pasado.