Subraya, sin embargo, que es una decisión del Banco de España y no del Gobierno. El vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, se comprometió a trasladar al gobernador del Banco de España, Miguel Angel Fernández Ordóñez, la petición que le ha hecho el presidente de la Ciudad Autónoma de Ceuta en relación a que no se vaya a cerrar las oficinas que la entidad tiene abiertas en Melilla y Ceuta.
Sobre este particular concreto, el representante de la Administración General del Estado quiso dejar bien claro que entendía los argumentos que le había expresado el presidente ceutí, Juan Vivas, pero que se debía tener en cuenta que la decisión era directamente del Banco de España y no del Gobierno, el cual no intervenía para nada y tenía una independencia tal y como marcan sus estatutos.
Justificó, de todas maneras, la decisión adoptada por el Banco de España de reducir sus sucursales en distintos puntos del país, teniendo en cuenta los avances que se han producido desde el punto de vista telemático y además la inclusión ya de nuestro país en la zona euro, dejando de ser el banco emisor, así como la reducción de costes.