Una vez más, los Bomberos han sido apedreados en la calle Méjico. Cuanto terminaron de extinguir un incendio en unos contenedores y mientras bajaban de regreso al Parque de Bomberos, sufrieron un gran número de pedradas. No una sola, sino que recibieron un gran número de impactos que se pueden ver en las fotografías que la Asociación de Bomberos Profesionales ha puesto en sus redes sociales. Por fortuna no ha habido que lamentar heridos, pero los Bomberos advierten de que este tipo de agresiones tiene muchas más consecuencias y éstas alcanzan a los vecinos de la zona: no pueden intervenir en el incendio hasta que sean acompañados por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
Desde Bomberos se ha informado de que ahora tocaba evaluar los daños que sufrió el camión con el que se hizo la intervención en la noche del sábado. Fueron los bomberos del turno de noche los que sufrieron la agresión, pero afortunadamente ninguno de ellos recibió una pedrada.
Explican que una de las piedras impactó en un cristal y, por suerte no traspasó el cristal y no provocó más daños que los materiales. Pero desde Bomberos denuncian este hecho. Y el problema es que no es la primera vez y creen que no será la última.
Afirman que es “la tónica general” en determinados barrios y tiene consecuencias para todos los habitantes del mismo. Dejando de lado que una de las piedras que se lanzan pueda alcanzar a una persona y herirla de gravedad, hay que reparar los daños que es algo que se costea con el dinero de todos.
Pero al margen de todo eso hay otra cuestión que todos los vecinos de los barrios en los que son apedreados los Bomberos y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado deben tener clara: se tardará más en intervenir.
Indicaron que desde las asociaciones de vecinos se debe tomar conciencia del peligro que supone para todos los ciudadanos estas agresiones y de la tardanza que se puede llegar a tener a la hora de hacer una extinción de un incendio.
Los Bomberos argumentaron que cuando se actúa en un barrio donde reciben pedradas deben adoptar otros protocolos de intervención. En estos casos tienen que esperar a ir acompañados de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para llegar a ese lugar y ejecutar su trabajo.
Y toda esta situación lo que produce es pena entre los bomberos porque son profesionales que están para ayudar a los vecinos de toda la ciudad ante momentos complicados y lo que reciben de parte de algunos son unas pedradas.
Pedrada a los Bomberos, a la espera de más información
En la calle Méjico se han producido un gran número de apedreamientos a los Bomberos y les suele pasar en la zona más arriba de la Peña Colón. Aunque en este caso, se desconoce aún el lugar exacto en el que recibieron las pedradas y la hora, ya que se está a la espera de más información desde el Gabinete de Prensa de la Ciudad.
Precisamente en este mismo lugar, la COA también sufría apedreamientos hace unas semanas.
Qué pena comprobar una vez más que Melilla está poblada por manadas de salvajes incívicos, que todos sabemos quiénes son, especialmente en los barrios que todos también sabemos... Pues eso, ¡decadente total!
Los comanches? Es sabido como se las traen!!! bestias incívicas, pena y desgracia. Es la educación, los valores y modales que les inculcan sus progenitores en casa. Que de morralla y basura humana. La solución pasa por exterminar y esperar unos 3000 años pa volverlos a procrear de nuevo, no vaya ser que quede algún brote.
Que no vayan!!!.. si se comportan como salvajes..cuando se les quemen un.par de coches, ya veran como los vecinos, por decir algo, hacen porque no tiren piedras...porque hay que recordar que los salvajes que tiran piedras son hijos y familiares de quienes viven en Cabrerizas
no teneis un par de ??para dar con ellos ¿ el miedo s la consequencia os va a conducir s la deriva.
Vergonzoso, por eso esta ciudad es penosa, por los irrespetuosos musulmanes.