La verdad es, hay que decirlo sin tapujos, que el fin de la civilización occidental y cristiana ha empezado ya de manera irreversible.
La derrota en Afganistán, vergonzosa y humillante, confirma el fin de ciclo. Todo un mundo, tal y como lo conocíamos, va a dejar de existir, todo ha sido patético, pero lo esperábamos, sobre todo si los protagonistas son de la talla de Biden y del resto de los caniches europeos.
Lo malo del caso es que ‘uropa’, ha blanqueado la impresentable actuación del Sánchez, desplazando a Torrejón a doña Ursula, no sé qué y a su adjunto para proclamarlo poco menos que un teofilántropo, al estilo de los revolucionarios de thermidor.
Era cosa de ver cómo los ministros de Sánchez acudían en tropel a la base militar, ¡para hacerse una foto con los afganos! transportados en avión desde Kabul. No faltó ninguno, por no faltar, estuvo hasta el más dicharachero del gobierno, el de Seguridad Social, que más que un ministro, siempre me ha parecido un tertuliano por la cantidad de majaderías y sinsorgadas que produce.
En el mientras tanto, me temo que “se ha quedado mucha gente atrás”, pese al eslogan que el Gobierno puso en boga al inicio de la pandemia. También me temo que el flamear de un trapo rojo o gritar “España, España”, recomendado por doña Margarita Robles para librar de todo mal a los infelices que no puedan acceder al aeropuerto de Kabul, les va a servir para poco.
Don Manuel Felipe me sugiere que al igual que la caída del Imperio romano fue larga, así la caída de la civilización occidental también lo será. El asesinato de Lampribio, se sucede todos los días antes nuestras narices, lo malo es que no nos lo creemos.
Por otra parte, ‘El de Siempre’, ha vuelto a dar el mingo a cuenta de los Mandamientos de la Ley de Dios. La verdad es que ya me cansa el personaje y no merece la pena ni un padrenuestro. El que quiera saber más que se meta en Google.
Vamos a lío,
11) Gijón
La ilustre Villa asturiana no merece figurar en este diccionario. Lo que pasa es que tiene una alcaldesa, zelote e ignorante que arrastra el nombre de tan ilustre ciudad por los albañales de la incultura, Doña Ana González, que tal es el nombre de la desventurada, ha suspendido para siempre la feria taurina de Gijón, porque recientemente se lidiaron dos toros en esa plaza con los nombres de feminista y nigeriano.
La señora alcaldesa se cree que los toros se bautizan de un día para otro y que los nombres que tienen no guardan relación con las reatas ni con otros aspectos de la ganadería brava. Es mucho pedir. Pero lo cierto es que un cargo público antes de lanzarse al precipicio de la estupidez debe llegar al mismo con un poco de cultura general.
No sé a qué esperan tantas asociaciones taurinas para presentar la correspondiente denuncia, por flagrante vulneración de la Ley que declara a la Tauromaquia Patrimonio Cultural español y obliga a los poderes públicos a protegerla y enriquecerla (ley 18/2013 de 12 de Noviembre), pero claro aquí las leyes ni se conocen ni se cumplen.
Ni don Gaspar Melchor de Jovellanos, ni don Melquiades Álvarez (asesinado en Paracuellos), ni don Torcuato Fernández Miranda, ni don José Luis Garci, por citar sólo algunos gijoneses ilustres, merecen compartir ciudadanía con este ejemplar del sectarismo y la incultura.
12) Mosca chupasangre
Las plagas no paran, leo en "Las Provincias" del pasado 20 de agosto que "aumenta la presencia de la mosca chupasangre en la Comunidad Valenciana, tras incrementar su presencia en Madrid, Aragón y Murcia a consecuencia de las altas temperaturas.
Los expertos en cuestión advierten “que su mordedura (sic) puede causar dolor, dejando un punto rojo e inflamación”. El simpático insecto, llamado también mosca negra, tiene su boca en forma de sierra y produce una pequeña lesión en la piel de personas y animales para inocular su saliva. El bicho tiene como objetivo al morder, chupar sangre, ya que de este modo obtiene el aporte nutricional que necesita para el desarrollo y puesta de huevos. Tal parece que se refiere al Sánchez. Pues enterados quedan.
13) Violación inversa
En el grupo de guasap en el que participo, ha tenido entrada este nuevo concepto. Se trata según los autores, de que dicha violacion es "rechazar tener relaciones con una mujer porque su cuerpo no cumple cánones estéticos. Es otra forma de acoso machista".
Entonces, si resulta que si ella quería, pero tú no, también el violador es el hombre.?
En fin, esto es lo que hay.
Que no le falte agua al elefante.
