Los cristianos dieron inicio al tiempo de Cuaresma, momento de preparación antes de la Semana Santa, con un Vía Crucis en la iglesia del Sagrado Corazón en la tarde de miércoles. Por primera vez, tuvieron que celebrar esta misa adaptándose a las restricciones decretadas por la pandemia del coronavirus. El templo no podía superar un tercio del aforo habitualmente permitido y los feligreses, además de llevar puesta la mascarilla, tuvieron que guardar distancia entre ellos.
El vicario de Melilla, Eduardo Resa, explicó que, a diferencia de otros años, se organizó el Vía Crucis para que los fieles pudiesen seguir la cruz de Cristo con la mirada y sin tener que moverse se su asiento. Además, ha sido más corto y se ha celebrado en un horario más temprano que en años anteriores para que no se acercara al toque de queda. De esta forma han querido dar cabida al acto, organizado por las cofradías de la ciudad, a pesar de las restricciones de la pandemia.
Asimismo, ayer también se celebró ‘Miércoles de Ceniza’. Son numerosos los actores que ya están pensando en cómo será la Semana Santa de este 2021, ya que el año pasado no pudo celebrarse en las calles debido al confinamiento.