El Melilla Sport Capital Voleibol llegaba este lunes a Melilla procedente de Ibiza y sin tiempo para descansar ni entrenar se enfrenta este martes, 26 de enero, a las 13:00 horas, en el Pabellón Javier Imbroda, al Voleibol Almoradí en partido correspondiente a la decimocuarta jornada de Superliga de Voleibol Masculina, que debió disputarse el pasado 13 de diciembre pero que tuvo que suspenderse debido al confinamiento del equipo melillense por un falso positivo por COVID en la plantilla.
El equipo revelación de la temporada recibe en casa al colista al que ya venció por un claro 0-3 en tierras alicantinas en la jornada inaugural de la Superliga.
Los de Salim Abdelkader no deberían tener problemas en casa para vencer con claridad a un equipo inferior en defensa y ataque a los melillenses, aunque todos los partidos hay que jugarlos y ganarlos en la pista.
Los azulinos llevan un 2021 un tanto irregular y ahora afrontan dos importantes partidos como anfitriones, ahora ante Almoradí y el fin de semana ante L’illa Grau, en los que deben vencer y convencer para llegar a un buen nivel de juego y moral a la Copa del Rey e incluso mirando ya por tener una buena clasificación de cara a la disputa de los playoffs por el título.
“Es un tema del que llevamos un tiempo hablando. De qué vale tanto esfuerzo económico, personal, de tiempo y trabajo para clasificarnos para la Copa y para los playoffs si luego vamos sin garantías y nos van a eliminar a las primeras de cambio. Tenemos que llegar al torneo de Copa con juego y confianza para disputar de tú a tú al menos la primera eliminatoria. Y de cara a los playoffs debemos intentar llegar lo más arriba posible. Cuanto mejor posición tengamos ahora más posibilidades de un rival asequible tendremos para intentar avanzar en la lucha por la liga”, asegura el técnico melillense, Salim Abdelkader.
Los azulinos plantaron cara al todopoderoso Almería, al que sacaron un punto en el tiebreak, y lograron vencer a un talentoso Manacor, rival directo por la quinta plaza, en los dos partidos en casa disputados en lo que va de año. Además, vienen de vencer con mucha autoridad a la UD Ibiza, un partido que ha cargado de confianza a la plantilla.
Sin embargo, Almoradí ha tenido un calendario muy duro en este 2021, teniendo que enfrentarse a los primeros clasificados de manera consecutiva. Palma, Almería y Teruel han sido los rivales de los alicantinos y todos les han logrado vencer por la vía rápida, aunque los alicantinos han demostrado ser peleones y han luchado cada set hasta el final liguero.
Melilla buscará un partido rápido en donde volveremos a ver rotaciones, debido a la carga de partidos del septeto titular, que sirva para preparar el partido del próximo sábado ante L’illa Grau y que consolide les consolide en la quinta plaza.
El equipo azulino deberá estar muy centrado, ir a por el partido desde el principio y no menospreciar a su rival si no quiere complicarse la vida. Los de Salim Abdelkader deben mejorar su saque y demostrar el nivel en recepción y bloqueo que desplegaron ante Ibiza para dominar desde el primer set e intentar llevarse el partido ante un equipo necesitado de puntos que viene a Melilla con ganas de revancha y de intentar remontar en la tabla.
“Va a ser un partido engañoso. Están en una situación muy complicada y cada partido es una final para ellos. Nosotros venimos cansados y nos debemos poner en pista sin entrenamiento. Ellos han peleado bien ante Teruel y no debemos menospreciar al rival. En principio si seguimos nuestra buena línea y paramos a sus atacantes no deberíamos tener problemas, pero si sus atacantes entran en juego pueden complicarnos. La clave va a ser imponer la intensidad desde el inicio y cometer pocos errores”, concluyó Salim Abdelkader, técnico melillense.