n la firma del protocolo de modificación del contrato del 2008 se reinicia la revisión del Plan General de Ordenación Urbana de Melilla, con el fin de planificar la ciudad para el futuro y así cubrir los déficits en infraestructuras que posee la ciudad.
El consejero de Infraestructuras y Urbanismo, Rachid Bussian, informó de que los cuatro próximos meses serán clave para el plan de ordenación urbana. Desde julio a octubre, se reelaborarán los documentos y revisarán los existentes para “aprovechar el camino recorrido pero adaptándose a la nueva normativa, como es la legislación medio ambiental, normativa urbanística”, entre otros.
“Esto va a marcar el devenir de nuestra ciudad. Va a marcar el nuevo desarrollo económico, social, cultural, industrial, de movilidad, sostenibilidad, accesibilidad. Va a marcar el futuro en los años venideros de la ciudad de Melilla”, aseguró Bussian.
Explicó que el objetivo es “redibujar” y diseñar un nuevo plan para implantar un modelo económico de ciudad, que pasa por una nueva planificación local.
Bussian reconoció que existe un déficit en infraestructura educativa, sanitaria, deportiva, zonas verdes, entre otros; por lo que el PGOU será una herramienta importante para responder a estas necesidades. De la misma forma, contemplan buscar una nueva ubicación para la planta incineradora y proponer dar mayor protagonismo al peatón.
La Ciudad trabaja con un cronograma que comienza a correr, y se estima que a comienzos de 2022, este plan se pueda poner en marcha.
Bussian indicó que la idea inicial era aprobarlo a finales de 2021, pero debido a la paralización de la Administración durante 4 meses por la crisis sanitaria del coronavirus, “seguramente nos iremos a enero o febrero de 2022 para su entrada definitiva del nuevo PGOU”. Recalcó que los próximos cuatro meses serán clave. También tomarán el cuenta los informes sectoriales relacionados con la Ley de Costa, con el impacto medio ambiental, entre otros.
De acuerdo con Bussian, una vez que se apruebe de manera definitiva el PGOU “no hay que parar y pensar en nuevos planes”, adaptando la ciudad a los nuevos horizontes.
El PGOU, como lo remarcó Bussian, busca corregir las deficiencias existentes proyectando cómo será la ciudad en un futuro. “Un Plan General de Ordenación Urbana nunca sería ordenado si dejamos a determinados barrio de la ciudad fuera”, dijo. De la misma forma, agregó que intentarán plasmar la “ordenación y la regularización de aquellas viviendas que estén fuera de dicho plan porque permitirá una mayor recaudación para las arcas públicas de la ciudad y una mayor estabilidad familiar y social para muchos de estos ciudadanos”.
Mencionó que en el PGOU se planteará la regularización de viviendas de los Distritos IV y V, así como de otros barrios de la ciudad cuyas casas no están inscritas.
Por otra parte, remarcó que respetarán el plan diseñado por Aena, estarán en conversaciones con el Ministerio de Defensa por haber “bastante suelo militar”, que una parte de los cuarteles ha sido liberado. También trabajarán con el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana; así como también con el de Medio Ambiente y Agricultura.
La nueva redacción del PGOU costará en total 175.000 euros. El reinicio de los trabajos costará 65.000 euros y las labores que se harán en 2021 otros 110.000 euros.
Alegaciones pendientes
El consejero de Infraestructuras indicó que hubo alegaciones del anterior estudio que no fueron resueltas, por lo que cuando el estudio pase a exposición pública en el tercer o cuatro trimestre del año, se responderán las que no obtuvieron respuestas así como también las que puedan hacer los ciudadanos.
Por otra parte, Bussian indicó que este plan se tratará en la Asamblea a través de comisiones informativas de Infraestructura y Urbanismo con los documentos que traslade el equipo redactor. Recalcó, además, que tenderán la mano a todos los grupos políticos porque “es un documento de ciudad, donde todos los grupos de la Asamblea pondrán llevar a cabo sus aportaciones, todos los colectivos, entidades, administraciones públicas y privadas”.
De Castro: “El plan urbanístico tiene que ser del siglo XXI, el pasado no nos va a ayudar”
El presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, calificó de “un hito” el reinicio de la revisión del Plan de Ordenación General Urbano de Melilla (PGOU). Aseguró que este viernes, fue un “día histórico” porque firmaron el inicio del estudio de la planificación local.
De Castro aseveró que este estudio y puesta en marcha debió hacerse hace mucho tiempo. No obstante, cree que es momento de mirar al futuro y ajustarse a la Agenda 2030.
“Es un hito porque se tendría que haber hecho. Estamos todavía con el del ’95. El Gobierno anterior hizo un intento o dijo que lo iban a aprobar hace 8 años y ya vemos que no, por eso estamos aquí y creo es un momento crucial porque Melilla tiene que ajustarse a la nueva Agenda 2030, a la sostenibilidad”, dijo De Castro, quien indicó que el plan urbanístico de la ciudad debe mirar al futuro.
Asimismo afirmó que es responsabilidad del Gobierno actual retomar el estudio con la firma de un protocolo, para posteriormente comenzar con los trabajos. En este punto, indicó que será el consejero de Infraestructuras y Urbanismo, Rachid Bussian, quien tendrá el mayor peso en este proyecto.
Este viernes, se firmó la modificación del contrato del 2008 para la revisión del PGOU. Con esta rúbrica, en un plazo de 20 meses debe culminarse el proyecto de revisión de 1995.
De Castro puso en valor la importancia del documento porque será una herramienta fundamental para solventar distintos problemas de la ciudad.
De la misma forma, indicó que el nuevo PGOU debe recoger los principios de desarrollo de las ciudades, contemplado en la normativa. “Melilla como ciudad mediterránea presenta unos valores urbanos muy positivos, que conviene conservar y potenciar. Es una ciudad compacta, intensa, compleja”, dijo durante la presentación, a la vez que resaltaba los espacios urbanísticos seguros con los que cuenta la ciudad.
El presidente de la Ciudad invitó a los melillenses a participar en el nuevo PGOU, porque será un “instrumento con vocación de permanencia durante más de una década”. De Castro espera que hagan sus aportes los sectores profesionales relacionados directamente con el urbanismo.
La empresa conoce la ciudad
El consejero de Infraestructuras y Urbanismo, Rachid Bussian, aseguró que trabajan con la misma empresa con que lo hizo el PP anteriormente, porque salió una licitación y se hizo una adjudicación tomando en cuenta varios criterios.
Aclaró que “no se ha adjudicado a la misma empresa del PP, sino a la que la Ciudad Autónoma de Melilla había otorgado dicha prestación”.
De acuerdo con Bussian hay que “aprovechar el camino recorrido” de estudios previos, adaptándolos a la nueva normativa, desechando la posibilidad de invertir unos 800.000 que pensaba el PP”.
Agregó que trabajan con la misma empresa, que ya conoce la idiosincrasia de Melilla. El contratar a una nueva habría alargado aún más los plazos.