El Pleno de la Asamblea ha sacado adelante con la aprobación de todos los diputados del nuevo pliego para el contrato de vigilancia de seguridad privada. La consejera de Presidencia, Gloria Rojas, ha defendido este documento asegurando que es el mejor pliego que se puede hacer y que permitiría hasta sumar 50 vigilantes más a este servicio de seguridad de las dependencias de la Ciudad. No obstante, aunque el PP ha dado su voto a favor, el diputado Manuel Ángel Quevedo ha criticado el retraso de 10,5 meses en dar el visto bueno a este contrato.
Son casi 20 millones de euros de presupuesto de licitación para este servicio que se ofrece de cara a los dos próximos años con una ampliación también de dos años más. Según este documento, se tendrá en cuenta en un 60% la oferta económica de la empresa y en 20% la bolsa de horas que ofrezca al margen de las exigidas por este pliego. También se puntúa la formación de los vigilantes.
El diputado del PP de Melilla explicó en su intervención que el Gobierno local iba a contar con el ‘sí’ de su formación, pero que no podían dejar pasar por alto que fue en agosto de 2019 cuando la anterior consejera de Presidencia, Paula Villalobos, llevó a comisión este mismo pliego con carácter de urgencia.
Quevedo aseveró que se quedó sobre la mesa porque había errores “importantes” en las cuentas a la hora de destinar más dinero del necesario para el pago de las nóminas, porque no se tuvo en cuenta que se bonifica en Melilla el 60% de la Seguridad Social ni tampoco se contempló en este pliego la bonificación que tienen las empresas y que también reciben los empleados y que desde hace años se recoge en los pliegos para que se reciba ese dinero. En el caso de los vigilantes son 80 euros más al mes en su nómina.
Pero para el popular, el Gobierno local podría haber tardado diez días en rehacer esta parte del pliego y no diez meses.
Además, agradeció a Rojas que destacara en la Comisión de Presidencia las aportaciones del PP porque para Quevedo la oposición que está realizando su partido no es de “tierra quemada”, sino de colaboración y debate, aunque no siempre estén de acuerdo con el Ejecutivo.
Por su parte, la consejera de Presidencia insistió en que este pliego para la contratación del servicio de vigilancia de seguridad privada de la Ciudad es “muy bueno”. Remarcó que es urgente que salga adelante porque se precisa ya de él.
Rojas indicó que se podrían sumar hasta 50 vigilantes más, aunque Quevedo matizó en otra intervención que a jornada completa serían poco más de 20 y que debían ajustar esta información de cara al ciudadano.
La titular de Presidencia aprovechó su intervención también para recriminar a la popular Esther Donoso que la acusara de dar “a dedo” el contrato de vigilancia sin negociado de publicidad. Rojas dijo a Donoso que durante su mandato como consejera de Hacienda se hicieron dos contratos de este tipo y que ella no salió a decir que se habían dado a dedo aunque tenía esa misma información. Le pidió cautela con ese tipo de declaraciones a la popular.
Rojas también subrayó que en este nuevo pliego se recogen todas las necesidades de las consejerías y de las instalaciones de la Ciudad, como el incremento que se precisa en general en todas las dependencias por la situación actual, así como en algunos espacios concretos como en el Fuerte de La Purísima, en Melilla La Vieja o en el Palacio de la Asamblea.
Por su parte, el popular indicó en su segunda intervención que si el Interventor había indicado en un informe de las cuentas de 2016 que no era correcto hacer esos contratos sin negociado de publicidad ahora el Gobierno local había hecho uno con el servicio de vigilancia. Echó en cara a Rojas que critiquen esos contratos hechos por el PP y luego su Ejecutivo los firme.
Quevedo añadió que si tuvieron que sacar contratos sin negociado de publicidad con relación a la vigilancia de las dependencias municipales fue porque el juzgado de lo contractual paró la adjudicación.
Rojas le respondió que eso ocurrió con el segundo, pero que el primer contrato solo tiene la justificación de un informe en el que se asegura que era urgente este servicio. Aunque luego la consejera reconoció que no le ha gustado tener que hacer este tipo de contrato sin negociado de publicidad. Pero añadió que el PP dejó “una administración muy mal”. Afirmó que dentro de un año los populares le podrán acusar de hacer mal las cosas, pero no ahora. Estas afirmaciones levantaron revuelo en las filas populares que indicaban que este Ejecutivo ya lleva un año gobernando.
Es una buena idea contratar vigilantes de seguridad privadas.
Pero ser un agente de seguridad en general implica otras cosas....
La mayoria se comportan como críos y en algunos casos les gustan comparar su trabajo con el de los policias, los desprecios son habituales sobre todo a los recien contratados y parecen que no tienen ni la altura suficiente para ese trabajo y no siguen las reglas.
Lo importante para la empresa que un guardia de seguridad esté ahi para dar apariencia de seguridad y orden y nada mas, a la mayor parte de los recien llegados parecen niños y los ponen para vigilar de noche y controlar a la gente que
Si quiera firarles a la cara le hara falta una escalera......
Ser vigilante de seguridad puede llagar a ser una profesion arriesgada en ciertos circuntancias.
Ser vigilante de seguridad es proteger a los demas y serán de gran ayuda en el desempeño de los servicios de un vigilante de seguridad.
Por eso contratar a gente de seguridad implica a contratar gente de altura suficiente ++
Tener miradas agudas para ser apreciado....
Veo actualmente obtener titulo de un guardia de seguridad es insufiente para una contratacion a un servicio de riesgo y amenazas amenudo
Otros 50 a dedo, y los funcionarios interinos que aprobaron los exámenes de agente tributario y agente de movilidad, hace justo un año, solo se han incorporado uno y tres respectivamente, vaya gobierno más incompetente, que poca transparencia, y que ganas de meter a los amigos, familiares y partidarios políticos.