Con pancartas y gritando “salida”. más de un centenar de tunecinos, que residen en el CETI de Melilla, se manifestaron para pedir el traslado a la península a las puertas del centro. Explican que llevan meses sin que ninguno de ellos haya sido trasladado a la península y piensan que los han metido todos en el mismo grupo sin que se distintga cuál es la situación personal de cada uno y su situación de vulnerabilidad.
Jihad, que lleva ocho meses en Melilla, contó que no a todos los tunecinos se les permitió salir para expresar su opinión y que vienen aquí para poder acceder a la península como el resto de sus compañeros. Incide en que son todos iguales y no entiende por qué ellos siguen bloqueados allí. Añadió que esta es la razón por la cual hay tantos de esta nacionalidad internos en el CETI o en otros lugares de la ciudad.
Expresó que ya están cansados de que cada vez que preguntan el por qué no tienen la salida, les digan que no lo saben o que esperen dos semanas o un mes, cuando al final nunca ocurre nada.
Además de ello, tampoco pueden volver a Túnez, por lo que no tienen forma de irse de Melilla, ya sea para continuar el camino que empezaron o para retroceder.
En la manifestación también está Hadya, que con tan solo 17 años emprendió este viaje porque no tenía oportunidad de labrarse un futuro en su país. Sin embargo, cuando llegó al CETI, vio que esto era “otro mundo” muy alejado de la idea que tenía de Europa.
Chineb y Ossama también piden el traslado. El primero se dirige incluso al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y a el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, para que “por favor” les den libertad de movimiento.
Migrantes económicos
En Túnez también hay movimiento. El martes, el presidente de la asociación ‘Terre pour tous’, Imed Soltani, acudió, con una madre de uno de los migramtes que hay en Melilla, a una reunión con el presidente de la Asamblea de Representantes del Pueblo Tunecino, Rachid Gannouchi, para explicarle la situación de los que están aquí a través de material fotográfico.
Soltani explicó la difícil situación de estos pues son considerados como migrantes económicos y al no huir de conflictos o situaciones que pongan en peligro sus vidas, es más difícil que se les acoga como refugiados o por razones humanitarias.
Marlaska, por su lado, anunció el pasado mes de abril, que se estaba negociando con el Gobierno de Túnez para repatriar a los tunecinos del CETI de Melilla.
De vuelta a casa, expediente de expulsión y salida del país. No necesitamos a más "pagapensiones " y vagos que luego nos toca mantener y que no se integran.
Nada de consentir chantajes de este personal, si quieren ir a Europa que empleen la ruta más cercana, Italia.
Pero como saben que allí ahora está un tal Salvini..., pues han decidido tirar para Melilla porque aquí tenemos al compasivo Sanchez y su amigo el coletas para dilapidar el dinero público en mantener a estos elementos.