En el CETI de Melilla se está preparando el traslado de varias decenas de personas a la península, según han explicado fuentes de Interior a El Faro. De momento, este se encuentra en una fase preliminar y se están estudiando los perfiles de los que podrán salir, por lo que en este momento no se tienen más detalles sobre el número concreto de inmigrantes a los que se les dará salida ni sus nacionalidades.
En la península, estos serán acogidos por las organizaciones, como Cepaim o Cruz Roja, con las que entrarán en el proceso de acogida para solicitantes de asilo. Estos, después de un periodo en el que reciben formación en castellano y profesional, se les notifica que si han recibido o no el estatus de refugiado.
Fue ayer cuando se les notificó a varios residentes del CETI que se están preparando lo que ellos denominan ‘salida’, es decir, el traslado a la península. Un grupo de ellos se concentró alrededor de las oficinas del centro y, según contaron a este medio, doce sirios y cinco familias subsaharinas eran a los que se les había notificado.
Desde que se decretó el estado de alarma el pasado día 14 de marzo, ningún residente ha podido salir del centro, según les explican, por su propia seguridad al estar extendida la pandemia del coronavirus. Sin embargo, al convivir en el lugar alrededor de 1.700 personas, la situación no es nada fácil para ninguno, según han trasladado tanto residentes como trabajadores.
En la tarde de ayer, Josep Buades Fuster, coordinador del equipo del Servicio Jesuita a Migrantes de Frontera Sur, contó a El Faro que la noticia “le alegraba”, porque según explicó, aunque el CETI fuera un lugar en el que se puede pasar un corto periodo de tiempo mientras se soluciona el traslado, “no forma parte del sistema de acogida de refugiados”. Por consiguientes, Buades aseguró que las familias y personas que son solicitantes de asilo “merecen que se cumpla la ley y que se les envie a dispositivos de acogida de refugiados”.
Además, expuso que, sin saber aún si los subsaharianos que se van a trasladar son solicitantes de asilo o no, el proyecto migratorio de estas personas incluye buscar trabajo , algo que es difícil de conseguir desde Melilla. Así pues, esperan que se vaya normalizando el traslado a la península, aunque son conscientes que hay plazas limitadas en los centros de allí. Aún así, cree que este es “un esfuerzo necesario”.
Verónica Barroso, responsable de Incidencia Política en Amnistía Internacional España, declaró que desde la ONG valoran positivamente la noticia de que se haya comenzado a llevar a las personas del CETI de Melilla a la península.
Barroso recordó que, desde que comenzó el estado de alarma, AI ha venido pidiendo al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, “el traslado inmediato”, sobre todo, de aquellas personas que se encuentran en una situación especial de vulnerabilidad. “Sabemos que en el CETI hay alrededor de 200 niños y niñas, que hya mujeres embarazadas y que también hay personas con algún tipo de enfermedad crónica u otras que pertenecen al colectivo LGTBI”, relató.
Así pues, “todas estas deben ser trasladadas inmediatamente”, declaró Barroso. Asimismo, creen que esta acción va en la buena dirección y esperan que continúen los traslados a la península.