La sentencia de la CEME tiene varias lecturas que entiendo, resulta obligatorio analizar con total tranquilidad. Es verdad que el Juzgado ha dictaminado que la actual directiva de la CEME está obligada a convocar nuevas elecciones, pero también es verdad que realiza un tirón de orejas a quienes no quisieron en su día presentarse por un tema puramente económico y que va contra los propios estatutos de la Confederación de Empresarios de Melilla.
La junta directiva de la CEME, capitaneada por Pepe Reyes, ha tomado la decisión de convocar nuevas elecciones y para ello ha previsto celebrar una comisión permanente el próximo día 25 con la intención de preparar toda la estrategia necesaria que permita dar un paso adelante. Queda muy claro que la junta directiva capitaneada por Pepe Reyes no busca ningún tipo de medraje personal para estar al frente de los destinos de la CECE porque, con la sentencia en la mano, podría perfectamente recurrirla aunque luego volvieran a no darle la razón y sufragar las costas. Sería una decisión perfectamente legal y con ello estarían ganando tiempo. Pero vuelvo a repetir que no es su intención de complicarle la vida a una organización, que cumple cuarenta años y que además de ser esencial para la vida económica y social de Melilla, lo es más en unos instantes de crisis como la que se padece y la que se avecina a nivel nacional. Lo que sí tengo muy claro es que Pepe Reyes y sus compañeros de junta directiva han dado la cara, están al frente de una confederación que tiene importantes grietas económicas y, sin embargo, ni les ha faltado voluntad ni les han faltado ganas a lo largo de estos catorce meses. Por ello entiendo, que esa intención expresada por Pepe Reyes de presentarse a la reelección debería concretarse después de la comisión permanente del día 25. Otro día explicaremos las razones por las cuales entiendo debe intentar continuar adelante.
Y la segunda apreciación que quiero establecer es que quienes en su día no dieron el paso están obligados ahora, si de verdad quieren estar presentes en la dirección de la CEME el abonar las cuotas que establecen los estatutos. Esos mismos estatutos que son muy claros y contundentes. Y donde el mismo Juzgado les ha dado igualmente un tirón de orejas.
Los empresarios en Melilla deben estar unidos porque la situación en la ciudad así se lo exige. Pepe Reyes y su equipo han demostrado que no tienen ningún apego al sillón porque repito, perfectamente podrían recurrir la sentencia y seguir ganando tiempo. Han abogado a lo largo de estos últimos catorce meses de pedir, por activa y por pasiva, la unidad de la clase empresarial melillense.
En el lado de enfrente, los empresarios que están alrededor de la Plataforma deberían tener igualmente altura de miras, la misma que ha tenido Reyes y su equipo con el compromiso de convocar elecciones, e integrarse en una candidatura encabezada por Pepe Reyes para dar sensación de continuidad dentro del empresariado. Que demuestren su no apego al sillón y que abonen esas cantidades que corresponden por el número de vocalías para que la CEME no termine siendo una institución pedigüeña tal y como está ahora.
En contestación al Sr. Luis Manuel Aznar
En su artículo hay varias incorrecciones, fruto quizás de una mala información -en el mejor de los casos- o de un interés desmedido en defender lo indefendible. La Sentencia es clara y diáfana: la CEME ha actuado de forma ILEGITIMA.
En la propia acta de la ya NULA Asamblea General del día 29/10/18 consta que tanto Hostelería, Transportistas como Acome habían abonado el importe correspondiente a las cuotas de los últimos cinco años como miembros de CEME-CEOE y se les consideraba como electores y elegibles. De nuestra Asociación no se hace mención pues abonamos la única cuota que se nos impuso -de forma no estatutaria- antes de la convocatoria. Por tanto, el “tirón de orejas” se lo debe dar usted mismo.
En cuanto a la decisión del Sr. Reyes de convocar nuevas elecciones, tampoco es correcto. Otro error y otro tirón de orejas. Quien ha decidido que las haya ha sido el Tribunal al declarar NULA las elecciones anteriores y es la COMISION PERMANENTE, según el art. 20 a quien corresponde determinar los miembros de la nueva Asamblea General y convocarla. Por supuesto, el Sr. Reyes desde que se conoció la Sentencia no ha dudado en que se deben celebrar nuevas elecciones y solo nos queda esperar que esta vez se lleven a cabo de conformidad a los Estatutos.
Nadie duda de la buena voluntad y el desinterés en el medraje personal de todos y cada uno los que conforman lo que usted llama Junta Directiva (Órgano inexistente según los Estatutos) pero ello no es óbice para que se actúe respetando el principio del funcionamiento democrático contenido en la Ley de Asociaciones, tal y como se señala en la Sentencia. Cosa que no han hecho… y si como usted indica podrían recurrirla y ganar tiempo está claro que, de hacerle caso, ya no actuarían en bien de la propia CEME sino por seguir aferrado al sillón. ¿No cree?
En cuanto a que llevan catorce meses abogando por la unidad de los empresarios deberían haber empezado por no provocar la crisis de identidad y representación que dio lugar a la creación de la PLATAFORMA DE EMPRESARIOS precisamente por no ponerse al frente de las reivindicaciones. Fue muy triste la imagen de los antiguos dirigentes de la CEME, encabezados por la sempiterna Sra. López y su Secretario General, poniéndose al lado de los culpables de la crisis económica y dando la espalda a los más de dos mil empresarios que nos manifestamos en marzo de 2018.
Y para su conocimiento y el de todos los melillenses sepa que cinco entidades miembros de la CEME que discrepamos de la ilegitimidad existente le presentamos un escrito el día 15 de agosto – bastante antes de celebrarse el juicio y conocer la Sentencia- ofreciendo el consenso y sin pedir la “cabeza” de nadie. Tan solo pedimos la vuelta a la legalidad. Es conveniente conocer las dos versiones antes de hablar.
De las dificultades económicas que está pasando -y más que va a pasar- la CEME podremos hablar con fundamento cuando podamos conocer la realidad de sus finanzas. De entrada, se debería aprobar el presupuesto para 2020 y establecer las cuotas de conformidad a lo que establecen los estatutos y no según capricho de los interesados. La situación de “pedigüeña” deviene de la mala gestión anterior.
Trabajemos todos por el PRESENTE Y FUTURO DE MELILLA.
José Luis Martínez Lázaro
Presidente ASEGEP MELILLA