El Gobierno local sostiene que las drásticas medidas de Rodríguez Zapatero harán que la economía local se resienta y reclama unas elecciones anticipadas.
El recorte del cinco por ciento de media en los salarios de los empleados públicos que trabajan en Melilla, tanto de la Ciudad Autónoma como de la Administración del Estado, supondrá que éstos dejarán de percibir alrededor de 20 millones de euros, según calculó ayer el vicepresidente de la Ciudad y consejero de Administraciones Públicas, Miguel Marín. Un hecho de que el Gobierno local no duda repercutirá negativamente en la economía local pues “si las familias de los funcionarios perciben menos dinero, consumirán menos provocando despidos o incluso el cierre de los comercios de Melilla”.
Tras el anuncio del presidente del Gobierno central, José Luis Rodríguez Zapatero, de recortes drásticos en materia social es para el Ejecutivo popular un motivo más de preocupación pues “es injusto que los españoles tengan que pagar las negligencias del presidente Zapatero”, apuntó Marín. Máxime cuando “hace más de dos años ya se le avisó que, de no tomar medidas y hacer reformas necesarias, España se vería inmersa en una crisis como la que estamos padeciendo” y añadió que “miles de españoles se verán afectados por estos recortes tran drásticos y que hace una semana anunció que no se realizarían más reformas”.
Lo más grave para los populares no es que el presidente del Ejecutivo nacional no tomara este tipo de medidas hace dos años sino que “negara la existencia de una crisis económica e insistiera en ver ‘brotes verdes” que han llevado al país a la situación actual con un gran déficit público y más de cuatro millones de parados.
Disolver las Cortes
En este sentido, para el vicepresidente de la Ciudad el presidente Rodríguez Zapatero “es incapaz de gobernar España y lo mejor que puede hacer es irse. Debe disolver las Cortes y convocar elecciones anticipadas porque es lo mejor que le puede pasar a los españoles”, apostilló.
Por último, Marín dijo no compartir medidas tan severas como la supresión de la ayuda de 2.500 euros por el nacimiento de un hijo pues “afectará indudablemente a muchas familias españolas y melillenses”, así como tocar un tema tan delicado como la congelación de las pensiones, punto en el que el dirigente autonómico expresó sus dudas. Primeramente porque dijo creer que el presidente del Gobierno central “tendrá que explicar en estos días cómo piensa ejecutar todas estas medidas, porque tocar las pensiones que están protegidas por una Ley es algo complejo”, finalizó.