Para el vicepresidente de CSIF Educación, Sergio Ramírez, el sistema educativo en la ciudad es “tercermundista y vamos a peor”.
A su juicio en la ciudad como Melilla, es primordial que la educación funcione de la mejor manera, “pues el futuro de la ciudad que queremos está en la educación”, dijo.
Ramírez valoró positivamente el nombramiento de Gloria Rojas como consejera de Educación y aseguró que es una persona capacitada para llevar esta área. El dirigente sindical informó que en septiembre solicitarán una reunión con la titular de Educación así como con el presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, a fin de trasladar sus planteamientos en distintas áreas.
Las peticiones que elevarán desde el sindicato a la Ciudad Autónoma son reiterativas: ceder los terrenos para la construcción de los centros educativos, mantener y duplicar el número de técnicos infantiles llevándolos a 120 y mejorar las condiciones de los colegios, “todos necesitan mantenimiento”.
“Los colegios son muy antiguos, necesitan un mantenimiento adecuado y cada vez más. Además de la accesibilidad para minusválidos”, dijo.
De acuerdo con Ramírez en Melilla se necesitan tres centros de educación Infantil y Primaria; y dos de Secundaria; “son urgentes, estamos con ratios ilegales en toda Melilla, el fracaso escolar es el número uno de toda España y la única manera de combatir esto es con la construcción de nuevos centros”.
Espera la Ciudad Autónoma ceda los terrenos para que el Ministerio de Educación construya nuevas escuelas de Melilla. La situación es tal, que según Ramírez, hacen falta 200 profesores.
Señaló que las medidas tomadas hasta ahora para minimizar las ratios son “parches”, enumerando las aulas modulares y la Casa de la Juventud.
Asimismo recordó que aún no se ha puesto la primera piedra para la construcción del colegio Gabriel de Morales, cuya licitación está abierta hasta el 22 de julio.
Perspectiva académica
El vicepresidente de CSIF Educación cree que el tema de las altas ratios no se solucionará en el próximo curso escolar.
A esta situación suma la alta tasa de natalidad de la ciudad, de las más altas de España, razón por la que siempre habrán infantes que colmarán los colegios.
“En otros sitios, por ejemplo, en la península están cerrando colegios. En la península hay clases a 20 o 18 niños, aquí estamos a 34 o 35 y subiendo”, dijo.
Recordó que hay un nuevo proceso de escolarización en el que los infantes que tengan residencia legal en la ciudad, serán incluidos en el sistema.
Así lo ha señalado el Gobierno central, quien de acuerdo a la normativa internacional y nacional, debe garantizar el derecho a la educación de todo infante que tenga su residencia legal en el territorio.
“Hay niños que necesitan mucho más apoyo (...) pero la situación es que prácticamente nos dicen que no va a haber ningún apoyo, una barbaridad, no ha a haber más dotación docente”, lamentó.
Para Ramírez el sistema educativo de Melilla “está en la UVI y a punto de tirarle del cable”, empeorando en los últimos años, señaló.
La falta de construcción de centros educativos, las ratios ilegales, el déficit de profesores en la ciudad y la necesidad de mejorar el mantenimiento de los colegios, así como la accesibilidad a todas las áreas son parte del panorama del sistema educativo en la ciudad.
El vicepresidente de CSIF Educación hizo énfasis en esta área para formar a la ciudadanía que hará y formará la sociedad del futuro. “En una ciudad como Melilla se necesita que la educación funcione”.
Acotó que Melilla tiene muchas “peculiaridades” por lo que pone en relevancia que las autoridades, sea cual sea el cargo, diputados, senadores, concejales, Delegación de Gobierno y Ciudad Autónoma estén atentos al área educativa en la ciudad.
Está claro en que en Melilla “no podemos ser una fábrica de los planes de empleo. De los colegios estamos sacando juventud para los planes de empleo”, criticó.
La petición es mejorar el área educativa, brindar una educación de calidad a los niños y jóvenes, a fin de formar a los futuros profesionales, dejando de lado que los chicos engrosen las listas de los planes de empleo.
De acuerdo con los dos
Suscribo lo escrito por Cesar, hemos convertido, en la práctica, parte de la educacion en adaptación de los niños marroquíes o españoles que no saben ni hablar español en clases de integración, los padres tampoco ayudan nada ya que tampoco tienen el nivel mínimo.
No hay más que ver el hospital y las idas y venidas de ambulancias marroquíes desde la frontera para saber en qué momento estamos. Lo peor es que aún será peor con el gobierno actual.
Sanidad y Educación son los pilares fundamentales de nuestro Estado del Bienestar, y en Melilla, esos pilares están totalmente carcomidos y al borde del colapso por el "turismo sanitario" y desde hace unos meses el "turismo educativo". No es de recibo que desde las administraciones locales se faciliten estas prácticas, a todas luces ilegales e incluso perseguidas en otras comunidades. Desde hace años, la dejadez y falta de políticas serias al respecto ha hecho del H. Comarcal un paritorio marroquí con más de un 70% de ingresos de marroquíes en algunos servicios, y si se permite y abrimos la mano con "el turismo educativo" en unos años parará exactamente igual en la educación.