La delegada del Gobierno en Melilla, Sabrina Moh, se reunió ayer con el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, para fijar y analizar los trabajos de refuerzo y modernización de la frontera con Marruecos.
En un encuentro al que asistieron también la representante del Gobierno Central en Ceuta y mandos de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, se abordó también la futura implementación de un sistema de reconocimiento facial, tanto en los pasos fronterizos de Melilla como de Ceuta.
Tras la puesta al día de los sistemas de vigilancia se acometerá la retirada de las concertinas y la instalación de medidas de seguridad menos cruentas.
El ministro del Interior se ha tomado más en serio que sus predecesores la actualización de la frontera, una infraestructura que data de 1988 y que se había quedado obsoleta. En principio, se destinarán más de 30 millones de euros para abordar las reformas.
La puesta al día de nuestra frontera es una prioridad para la ciudad. Es fundamental que deje de ser tan permeable como ahora y evitar la entrada de inmigrantes de forma irregular.
También, es capital que se identifique fehacientemente a aquellos que la atraviesan y entran en Melilla. El tráfico que se registra es de miles de personas y necesitamos saber quien llega a la ciudad.
Los plazos de ejecución de la obra son largos, pero es una buena noticia que ya se esté trabajando en ello. Cuanto antes se refuerce la frontera, mejor para Melilla.