El Colegio La Salle el Carmen celebra una vez más sus tradicionales jornadas de actividades y juegos de ‘Azules y Amarillos’ en honor al patrón del centro, San Juan Bautista de La Salle. Este 2019 es especial porque se conmemora el tricentenario de su muerte y es el año jubilar lasaliano.
El centro prácticamente se ha dividido en dos equipos y van a competir en diversos juegos y actividades hasta al próximo viernes 24 de mayo. Los chicos participarán actividades que van desde partidas al tradicional juego del pañuelo, torneos de baloncesto, y carreras de velocidad, e incluso refrescantes lanzamientos de globos de agua, entre otras.
Este miércoles fue el acto de inauguración de las jornadas y los padres de los alumnos del Colegio de La Salle de Melilla no quisieron perderse ver a sus hijos desfilar vistiendo orgullosos los colores de amarillo y azul en el patio del centro. De hecho, esta primera jornada también es especial para ellos, ya que podrán participar junto a sus hijos y sus maestros en algunas de las actividades.
Competitividad y respeto
Algunos padres, como Óscar, aseguran tener el corazón dividido porque sus hijos pertenecen a equipos diferentes; otros apoyan al color al que siempre ha pertenecido, bien el amarillo, bien el azul. Aunque todos señalan que con este tipo de actividades, aunque se basen en una competición entre equipos, se trata de fomentar el respeto hacia el otro.
“Hoy voy con los amarillos, lo que pasa es que he tenido azules toda la vida ”, explica Pilar, una de las madres que asistió a la inauguración para ver a su hija. Reconoció que es cierto que existe la rivalidad ya que compiten desde pequeños.
“Ellos se llevan muy bien entre las clases, pero los azules son azules y los amarillos son los amarillos, eso es así”, expresa. Pilar asegura que las pruebas iban a salir de forma estupenda: “Hace un día magnífico y lo importante es el espíritu lasaliano de diversión, de jugar, de pasarlo bien, de unidad entre los alumnos de los profesores y los padres, a pasarlo bien”.
Una despedida
Además de ser ser un homenaje al patrón del colegio, estas jornadas también son un acto de despedida para los alumnos del último curso. Los chicos de 4º de la ESO estos días vestirán las camisetas verdes y harán de árbitros en todos los juegos y actividades deportivas.
Amal lleva en colegio desde Infantil y ha sido del equipo amarillo; cuenta que llegar hasta ahí y vestir de verde significa mucho para ella. Por otro lado, Pablo reconoce que no lo vive con tanta intensidad como antes, pero que es un momento muy especial para él y sus compañeros, porque llevan muchos años en el centro y han podido ver su trayectoria durante todos los cursos.