El director provincial de Educación, Juan Ángel Berbel, aseguró a El Faro este fin de semana que las aulas modulares no estarán terminadas para el inicio de curso y que espera poder ocuparlas para octubre. Los padres de los estudiantes que iban a empezar el colegio el pasado año en estas instalaciones y que finalmente tuvieron que llevar a sus hijos al antiguo Centro de Profesores y Recursos (CPR) están muy enfadados porque les dijeron que en septiembre estarían terminadas. También están preocupados porque no saben cómo van a caber sus hijos más los nuevos alumnos en el CPR cuando se trata de un inmueble pequeño, indicaron a El Faro.
El pasado año todos los niños que había en este centro eran de 3 años y ahora pasan a segundo de Infantil con 4 años. Pero como es preciso formar una clase de 3 años nueva e irán a este centro por la falta de aulas, los padres se preguntan si habrá espacio para todos. Aseguraron que el patio es muy reducido y ya había dificultades el pasado curso para que sus hijos hicieran las clases de psicomotricidad en esta zona.
Otra madre con la que ha hablado este periódico explicó que le parece mal que su pequeño tenga que volver a ir al CPR porque las aulas no estén terminadas cuando se ha tenido un año para ello. “Creo que nos están toreando”, aseveró.
En este sentido, comentó que fue tremendo el pasado curso el periplo que tuvieron que pasar. Como no estaban las aulas prefabricadas cuando comenzaba el curso, la Dirección Provincial de Educación habilitó una clase en el centro de formación de Carretera de Hidum de las hermanas de María Inmaculada. Pero los padres se negaron a llevar a sus hijos a esas instalaciones al encontrarse muy lejos de su zona de referencia. Por ello, Educación tuvo que habilitar el CPR que sí estaba más cerca de sus hogares.
Esta madre no ve normal que de nuevo no tengan las aulas prefabricadas terminadas y su hijo tenga que comenzar el curso en otro centro. Subrayó que esto ocasionará a los niños más trastornos que otra cosa con tanto cambio.
Aunque realmente no sabe si confiar en que para noviembre se hayan mudado de centro y los niños puedan ir a las aulas prefabricadas instaladas en el cuartel de Santiago. Indicó que no se ha cumplido ningún plazo de finalización de obra y puede que éste no sea la excepción de la regla.
También lamentó que no les faciliten información más directa de cómo va el proyecto de las clases modulares de forma más continuada para que no tengan que enterarse por la prensa.
Esta madre reiteró que están muy enfadados por la falta de compromiso de la Administración y porque el anterior director provincial José Manuel Calzado se comprometió con ellos a que estuvieran terminadas este curso.