Los dirigentes políticos melillenses volvían ayer a la carga con el asunto del Puesto de Inspección Fronterizo, PIF, acrónimo que ya se nos ha hecho del todo familiar. Decía la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, que trabajan todo lo rápido que pueden para poner en marcha la orden del Ministerio de Agricultura para el despliegue del control de cara al Aid El Kebir. Su intención, asegura, es compaginar legalidad con tradición.
Por su parte, su antecesor en el cargo, el popular Abdelmalik El Barkani, reiteraba que el puesto no era una novedad y que el año pasado ya se puso en funcionamiento. También se unía a la catarata de declaraciones el diputado de CpM Rachid Bussian, que se preguntaba que si el PIF fue colocado el año pasado porqué el anterior delegado del Gobierno no se había hecho ninguna foto al presentarlo a la ciudadanía.
Todos los partidos parece que tiene algo que decir respecto al tema, pero al ciudadano lo único que le llega es una serie de mensajes confusos. Respuestas y desmentidos de unos y otros que no aclaran la situación.
Lo que a los melillenses realmente le interesa es que los políticos resuelvan los problemas de la ciudad. Más allá de si la iniciativa es una novedad o si por el contrario ya se implementó el pasado año, lo que los ciudadanos necesitan es información sobre como va a funcionar el control, conocer cuales son los pasos para poder introducir los borregos y tener garantías de que si cumplen con los requerimientos legales oportunos van a poder disfrutar de la fiesta.