Pudo ocurrir una tragedia. La Guardia Civil rescató en la madrugada del lunes a 19 migrantes que habían sido lanzados al agua desde una patera que se aproximaba a la playa de Horcas Coloradas
Tras arrojarlos, los dos patrones de la embarcación se dieron a la huida. Con un mar en malas condiciones y con resaca por viento de levante, el propio Cuerpo calificó la intervención de “dramática”.
Los hechos se produjeron sobre las 5:15 horas, cuando los agentes observaron a una embarcación que iba a alta velocidad y que, relativamente cerca de la orilla, comenzó a arrojar al mar a las personas que transportaba.
Cuando los agentes del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) llegaron al lugar, localizaron a tres personas (dos varoones y una mujer) que estaban pidiendo ayuda. Uno de ellos no llevaba chaleco salvavidas y, al agarrarse a los otros dos, hacía que todos corrieran peligro de hundirse. El resto también fueron rescatados por los agentes.
En la patera viajaban 15 varones y cuatro mujeres. Uno de los hombres tenía síntomas de ahogamiento e hipotermia, aunque fue estabilizado tras ser atendido por la Cruz Roja en el puerto.
La Benemérita asegura que en lo que va de año ya ha habido diez casos en los que las mafias han utilizado este procedimiento para introducir irregularmente inmigrantes por mar en Melilla.
Una vez más, las mafias no tienen remordimiento alguno en abandonar a los inmigrantes en el mar. Aunque los dejaron cerca de la costa, el hecho de que fuese de madrugada, en una zona rocosa y con el mar revuelto, podría haber desencadenado una auténtica tragedia.