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La Consejería de Seguridad Ciudadana sanciona a 17 personas en lo que va de mes, a otras 12 en enero y a 105 el pasado año
Un total de 300.000 euros se recaudaron en el 2016 por parte de la Consejería de Seguridad Ciudadana en concepto de multas a taxistas pirata. Así lo destacó ayer el titular de esta área del Gobierno local, Isidoro González, que reconoció que es “un problema” porque supone una competencia desleal al transporte público. Señaló que no sólo Melilla sufre esta situación, sino que se da en otras ciudades. Por ello, subrayó que se está haciendo “un esfuerzo importante” para sancionar a estos conductores ilegales y evitar que continuen esta situación.
La sección de tráfico de la Policía Local es la encargada de sancionar a estas personas. De hecho, González subrayó que ya en el 2016 se incrementó el número de denuncias interpuestas contra los taxistas pirata en la ciudad respecto al anterior año. En concreto, fueron interpuestas 105 multas.
29 en lo que va del año
Pero el consejero señaló que este año los agentes locales continúan con esta labor. En concreto, en enero impusieron doce sanciones y en lo que va de este mes, 17.
González aseguró que está en contacto permanente con la Asociación de Taxis de Melilla y con la COA. “Existe el problema. Lo conocemos y dentro de los recursos con los que contamos, se está haciendo ese esfuerzo”.
El titular de Seguridad Ciudadana aseveró que está pendiente de este tema y firma a diario sanciones contra taxistas pirata que se imponen por los policías locales. Además, aseguró que en un porcentaje muy elevado se cobran las multas y son pocos los vehículos que se quedan abandonados.
En relación a la imposición de penalizaciones, el consejero señaló que rondan los 300 y los 1.500 euros, aunque depende de si la persona es reincidente.
González afirmó que comprende que la labor de los policías para el sector del transporte público nunca sea suficiente, pero aseveró que siguen insistiendo en las reuniones de trabajo con la Jefatura de Policía Local en que es uno de “los grandes problemas” de la ciudad y en buscar fórmulas para reducirlo y erradicarlo.
Un asiento, por 50 céntimos
Un viaje de la frontera de Beni Enzar al centro de la ciudad en un taxi pirata es tan barato que por eso lo escogen para desplazarse muchas personas.
Un asiento en estos coches cuesta 50 céntimos de euro, aseguraron usuarios a El Faro. Es más, indican que si desean que el taxi ilegal les lleve solo a ellos hasta la plaza de España no les cobran más de 3 euros, cuando el coste mínimo de un taxi en la ciudad es 3,2 euros. Estas personas priman que sea barato a las condiciones de los vehículos o si tiene licencia para el transporte de pasajeros.
Pero es que ese precio es más barato que un billete en la COA y, por ello, también les resta clientes porque el coche llega antes que el autobus a su destino final.