-
El presidente del Puerto afirma que van a utilizar todos los medios que contempla la legislación para acabar con el problema de los menores l Considera que estos niños estarían mejor si aceptaran la tutela de la Ciudad
“Los motores de los barcos hacen más daño que las concertinas”. Así lo aseguró ayer el presidente de la Autoridad Portuaria, Miguel Marín, que reiteró que este sistema de seguridad es legal y no provoca daños siempre que los jóvenes no traten de colarse en las instalaciones. Marín recalcó que van a utilizar “todos los medios legales” para solucionar el problema de los menores extranjeros. Recalcó que este tipo de sistema de seguridad se utiliza en muchos espacios y criticó a aquellos que, más que ayudar a estos niños, los animan a seguir viviendo en la calle o a intentar colarse en los barcos para llegar a la península.
El máximo responsable del Puerto lamentó que algunas ONG “que viven de la inmigración irregular” fomenten que estos niños no vayan a los centros de acogida, sino que sigan viviendo en la calle y arriesgando sus vidas. Reiteró que el hecho de tratar de introducirse en los buques entraña peligros mucho más graves que las heridas que pueda provocar la concertina. Aseguró que las turbinas de los motores pueden llegar a provocar que estos pequeños pierdan su vida.
El presidente de la Autoridad Portuaria criticó también a formaciones como Coalición por Melilla (CpM) que han mostrado su oposición a la instalación de esta concertina. Marín dijo que hay dos formas de entender la ciudad. Una es la de CpM y el resto de “partidos satélite”, que apuesta por “el caos y la incertidumbre”. La otra, afirmó el popular, es la del PP y el Gobierno local, que busca solucionar los problemas que hay actualmente y que afectan a los ciudadanos.
“Lo que quiere Aberchán es malo para Melilla y malo para los menores que viven en la calle”, aseveró el presidente del Puerto, que aseguró que lo mejor para estos niños es que acepten la tutela de la Ciudad y vayan a los centros de acogida para recibir una atención adecuada, en lugar de seguir viviendo a la intemperie.
El presidente de la Autoridad Portuaria se mostró confiado en que los medios que se van a adoptar para frenar las intrusiones sirvan para frenar la entrada estos jóvenes, en muchos casos adultos, que arriesgan su vida para colarse en un barco.
Sobre el más estado de las cámaras de seguridad de estas instalaciones que hace unos días denunciaba AUGC (Asociación Unificada de Guaridas Civiles), Marín aseguró que no tiene conocimiento de esa situación ni ha recibido ninguna información sobre incidencias de este tipo. En cualquier caso, señaló que la intención con el nuevo sistema de seguridad es que haya más vídeovigilancia en la zona.
El presidente de la Autoridad Portuaria adelantó que hoy mismo realizará una visita a la zona de la escollera del puerto con los medios de comunicación para dar cuenta sobre los avances en la obra que se está haciendo en la zona para mejorar la seguridad.
Hay que señalar que varias entidades, entre ellas Unicef y Save the Children, han mostrado su oposición a la instalación de la concertina para frenar la entrada de menores. Ambas ONG creen que este tipo de sistemas no sirven para disuadir a los jóvenes que tratan de colarse en la zona, sino que lo único que acarrean son más riesgos para estos jóvenes. Indican que hay que analizar cuál es la raíz del problema y por qué estos niños eligen intentar colarse en los barcos en lugar de recibir la tutela de la Ciudad.
Por parte de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) la postura es parecida. No confían en que este sistema vaya a suponer un cambio sustancial en la situación. Indican que muchos jóvenes ya llegan a nado desde las Torres del V Centenario hasta los barcos y que si se coloca esta concertina serán más los que utilicen este sistema. Además, consideran que supondrá un mayor trabajo para los agentes, ya que si algún chico resulta herido tendrán que ser los guardias los que le den la primera atención.
Precisamente este lunes dos menores tuvieron que ser rescatados en el puerto de Ceuta, después de quedar atrapados en la concertina de la valla que protege estas instalaciones. Fueron los efectivos de la Guardia Civil los que se encargaron de sacar a los chicos de esta alambrada. El objetivo de los jóvenes era colarse como polizones en un barco para intentar llegar a Algeciras.
El presidente del Puerto reiteró ayer que van a seguir trabajando y se mostró convencido de que más pronto que tarde los esfuerzos que se están realizando por parte de la Administración para atajar esta situación darán sus frutos.