-
El consejero considera que la ONG tira de “demagogia” cuando habla de reubicar a los niños
El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, consideró ayer que lo que tendrían que hacer las ONG como Save The Children es denunciar la complicada situación que viven los menores extranjeros no acompañados a nivel internacional en lugar de “hacer demagogia”. “Que arrimen el hombro y trabajen de forma más eficiente”, aseveró el consejero. Ventura respondió así a la petición hecha por esta organización que considera que habría que reubicar a estos niños en otras regiones. La entidad apuntaba esta semana que esta medida afectaría a los pequeños que residen en Melilla, Ceuta y Andalucía, porque estas regiones están saturadas.
El consejero recalcó que donde hay que trabajar es en origen y que el problema no se soluciona enviado a los menores a otros puntos del país. “Save The Children sabe perfectamente que esta es una cuestión que no sólo afecta a Melilla o Ceuta, sino a toda Europa”, aseveró.
Ventura dijo que el lugar idóneo para estos menores sería estar con sus familias. “Para tener un desarrollo adecuado lo mejor para un niño es estar con su familia, en su entorno y con sus costumbres”, aseveró el máximo responsable de Bienestar Social que recordó que muchos de los niños que están acogidos en nuestra ciudad tienen a sus familias al otro lado de la frontera. Es más, recordó que muchas veces son los propios padres los que traen a los pequeños hasta Melilla pensando que aquí podrán tener mejores oportunidades.
El consejero reiteró que los que deberían hacer las organizaciones que trabajan con menores es preocuparse de esta situación y trabajar para cambiarla, en lugar de hacer discursos “demagógicos” que no conducen a nada.
Actualmente en la ciudad hay más de 630 niños acogidos, la mayoría de ellos en la Purísima, donde residen unos 440 chicos. La mayor parte de estos niños proceden de Marruecos.
Hay que recordar que Save The Children dijo el viernes que en las dos ciudades autónomas las oportunidades de inclusión de estos menores acogidos son limitadas y que esto provoca que algunos prefieran pasar como adultos para así llegar a la península y continuar su proceso migratorio. “Este plan de reubicación es fundamental para proteger a los menores frente a la explotación por parte de las redes de trata que puedan operar en sus entornos”, afirman desde la entidad, que recalca la necesidad de luchar contra las mafias que trafican con personas.
Los educadores de calle no estarán hasta enero o febrero de 2018
El programa de educadores de calle no se pondrá en marcha hasta enero o febrero. Así lo afirmó ayer en declaraciones a El Faro el consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, que indicó que al ser un contrato de cuatro años ha sido necesario enviar la documentación a Europa, lo que retrasará un poco el proceso. No obstante, el consejero apuntó que se ha tramitado por el procedimiento de urgencia, por lo que confían en que se puedan acortar los plazos y comience a funcionar a principios del próximo año. Recalcó la importancia de la puesta en marcha de este plan de acción y dijo que quieren que tenga continuidad en el tiempo. Un total de quince trabajadores se incorporarán a este plan que pretende trabajar con los niños que se niegan a ser acogidos por la Ciudad.
La Purísima seguirá gestionada por la misma empresa
Arquisocial continuará siendo la empresa encargada de la gestión de la Purísima a partir del próximo año. El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, aseguró ayer que ha sido la única empresa que se ha presentado al concurso para la adjudicación de este nuevo contrato, que asciende a unos cicno millones de euros. La decisión ya ha pasado por comisión y la empresa comenzará a aplicar el nuevo pliego de condiciones a partir del 1 de enero del próximo año. Ventura indicó que no hay muchas empresas a las que les interese la prestación de un servicio de este tipo. Hay que recordar que la Ciudad elaboró un nuevo pliego de condiciones que se adaptara a las nuevas circunstancias del centro, que acoge ahora a unos 440 menores. El nuevo pliego supondrá un aumento de plantilla y recoge la posiblidad de que lleguen a vivir en las instalaciones hasta 450 niños.