Lo condenan como autor de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros
Los magistrados de la Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Málaga, con sede Melilla, condenaron ayer a un hombre al pago de una multa de 720 euros por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros. El encausado, para el que la fiscal inicialmente pedía una pena de cinco años de prisión, trató de embarcar llevando en su coche a otra persona que carecía de documentación legal.
Según se explicaba en el escrito de acusación, al que pudo acceder El Faro, los hechos tuvieron lugar en torno a las 22:30 horas del día 22 de septiembre de 2012. El procesado fue sorprendido junto a otro individuo por agentes de la Policía Nacional en la Estación Marítima de Melilla. Tenían la intención de embarcar con un vehículo en el buque Juan J. Sister, con destino a Málaga.
Uno de los pasajeros se identificó con un pasaporte del que, pese a ser auténtico, no era su legítimo portador. Todo ello, a juicio de la Fiscalía, fue consentido por el procesado, ya que tenía la intención de introducirlo ilegalmente en la península, vulnerando la legislación sobre entrada o tránsito de extranjeros. Según la acusación, el encausado era “plenamente conocedor” de que esta persona “carecía de documentación legal” para subir a un barco y viajar.
No iba oculto
El acusado fue condenado a una pena muy inferior a la que inicialmente se le pedía por el presunto delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, librándose incluso del ingreso en prisión. Esto fue así porque el individuo al que trató de trasladar de forma ilegal a la península no estaba oculto en el automóvil, ni su integridad o vida corrieron riesgo alguno, como suele ocurrir con este tipo de delitos, previstos y penados por el artículo 318 del Código Penal.